La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) tiene como meta detener el crecimiento de la mancha urbana, pero no lo va a hacer en perjuicio de la industria de la vivienda, este sector va seguir construyendo con una mejor regulación, advirtió su titular, Jorge Carlos Ramírez Marín, ante la Asociación Nacional del Notariado Mexicano.
Explicó que la apuesta del Gobierno de la República es la densificación, crear desarrollos habitacionales hacia arriba en centros urbanos, pero con planeación y en coordinación con los estados y municipios para evitar que escaseen los servicios y se deteriore la calidad de vida.
El secretario Ramírez Marín detalló que esta tarea implica un esfuerzo adicional que es consolidar el registro de las reservas de tierra intraurbana, medida que evitará que los mexicanos pobres sean desplazados de las ciudades, al no contar con los suficientes recursos para adquirir una vivienda.
Reconoció que la tierra de las ciudades se va a encarecer, pero, dijo, el Gobierno trabaja para estar preparado con alternativas para quienes ganan menos de cinco salarios mínimos. Los pobres no serán mandados lejos de las ciudades y los que tengan dinero cerca de ellas. El registro de tierras garantiza que haya vivienda para todos, agregó.
El secretario recordó que en los últimos 30 años la mancha urbana creció 700 por ciento, mientras la población lo hizo en 210 por ciento. “Así pasamos de 15 zonas metropolitanas a 59 y no queremos ni una más, con esas nos quedamos contentos, ahora hay que planear y construir vivienda sustentable dentro de las ciudades, con viviendas habitadas y predios regulares”.
El funcionario prometió ir de prisa y con trabajo fructífero, pero solicitó al gremio del notariado incorporarse a las tareas de ordenamiento territorial. Su trabajo, agregó, es clave en los procesos de seguimiento y control del programa de modernización de los catastros y registros públicos de la propiedad, también su participación para mejorar las reglas a fin de que la escrituración sea más rápida y más justa.
El presidente de la Asociación Nacional del Notariado Mexicano, Javier Pérez Almaraz, dijo que los cuatro mil notarios adheridos a esta organización se comprometen a aportar mayor seguridad en la titulación de las viviendas y en las garantías hipotecarias.
Explicó que desde el 2006, los notarios de México han coadyuvado a la modernización de los registros públicos de la propiedad, pero hay mucho por hacer en los catastros. Es momento de retomar los trabajos para crear un modelo de inscripciones prácticas en lo mercantil y en lo inmobiliario, dijo.