Fraude modelo en autopista urbana

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El gobierno federal ya evalúa no copiar el modelo de infraestructura de vialidades y el metro realizado durante la administración de Marcelo Ebrard al considerar que es un fracaso por el sobrecosto de obra y por el abuso tanto en el modelo de licitación como por los cálculos realizados por concesionario y constructores. 

A su vez diputados del Grupo Parlamentario del PAN en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF),  alertaron sobre un posible rescate financiero de la Supervía Poniente, debido a que el aforo de automóviles que se preveía no se está cumpliendo debido a los elevados costos que ubican esa vialidad como la segunda más cara del mundo, pues por casi dos kilómetros de recorrido se pagan 31 pesos.

En la ciudad de México en conferencia de prensa, el Presidente de la Comisión de Hacienda, Héctor Saúl Téllez Hernández, la integrante de la Comisión de Movilidad, Transporte y Vialidad, Laura Ballesteros Mancilla, y el Presidente de la Comisión de Transparencia, Gabriel Gómez del Campo, cuestionaron lo que en su momento el ex jefe de Gobierno Marcelo Ebrard presumió como una de sus grandes obras, se traduzca hoy en un gran fracaso.

 “El anterior Jefe de Gobierno, el señor Marcelo Ebard nos dijo que iba a costar cinco pesos el kilómetro, y ahora nos encontramos que está en un promedio de 17 a 20 pesos. Es evidente que no están recaudando la proyección que se había previsto para la Supervía, es inminente que se empiezan a ver visos que la rentabilidad no se está cumpliendo…  ojala no ocurra el Salinazo, el salinazo del rescate de la Autopista del Sol, ojala no tengamos un Marcerazo con la Supervía”, sentenció.

 Abundó que un gobierno que se dice de izquierda como el que encabezó Marcelo Ebrard, se dedicó a realizar obras caras destinadas a un sector que no es el prioritario para esta ciudad.

 El diputado Gabriel Gómez del Campo destacó que la Supervía Poniente es la segunda autopista de cuota más cara del mundo, sólo superada por la vialidad Alemana de Nürburbing Nordschlicfe donde se paga el equivalente a 20 pesos por kilómetro.

 “Nosotros sabemos perfectamente los costos de la Supervía por 1.9 kilómetros cuesta 31 pesos, cuesta cinco veces más que la México-Toluca que cuesta 2.95 pesos por kilómetro; la México-Querétaro, 1.21 pesos por kilómetro; la México-Pachuca, .92 centavos por kilómetro; una carretera cara, la Chicago Skyway, el equivalente a 6.19 pesos por kilómetro”, ejemplificó Gómez del Campo.

 A su vez, la Vicecoordinadora del GPPAN, Laura Ballesteros Mancilla, explicó que al gobierno de Marcelo Ebrard antepuso vialidades elevadas con enormes inversiones económicas, pero que no resuelven de fondo la movilidad en la ciudad de México, pues se privilegió al automóvil por encima del transporte público. “Nos quedó a deber seis líneas de Metrobús”.

“Al PAN le interesa construir una ciudad segura y que esté hecha para las personas, que privilegie a las personas por encima de los automóviles o de las autopistas en materia de movilidad. Precisamente por eso también, independiente al desaseo, la falta de transparencia y de rendición de cuentas en estas obras, así como el impacto de las mismas… nos importa saber qué impacto están teniendo en la vida diaria de los capitalinos”, destacó Ballesteros Mancilla.

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