Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Ricardo Anaya Cortés (PAN), exigió al embajador Earl Anthony Wayne una investigación profunda, rápida y con consecuencias sobre el presunto espionaje de Estados Unidos a autoridades mexicanas, el diplomático norteamericano aseguró que su gobierno se toma muy en serio el caso, pero no comentará públicamente cada uno de estos “alegatos”.
Ambos participaron como testigos de honor en la instalación del Grupo de Amistad México-Estados Unidos. Ahí el diputado presidente le recordó al embajador Earl Anthony Wayne la frase de Benito Juárez sobre el respeto al derecho ajeno, y le dijo: “el respeto a la vida interna del otro país es la paz, el respeto a la privacidad del otro es la paz” y precisó: “la paz a la que se refiere Juárez es mucho más que la simple ausencia de conflicto. Es confianza, es entendimiento, es cooperación, es posibilidad de construir juntos beneficios para nuestros pueblos”.
El diputado presidente se refirió de esta manera a las informaciones sobre el presunto espionaje de Estados Unidos a los entonces presidente Felipe Calderón y candidato presidencial, Enrique Peña Nieto.
En la reunión, comentó que en el Pleno de la Cámara de Diputados hay una inscripción en letras doradas que destaca por su tamaño, pero –agregó- hoy también por su vigencia, las palabras del ex presidente Benito Juárez: “Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”.
De manera clara y directa, Anaya Cortés dejo en claro al embajador Wayne su convencimiento de que “no debemos jamás callar por respeto, lo que podemos decir respetuosamente”.
Y expuso: “hoy reafirmamos la necesidad de que la investigación que ha sido ya comprometida por el presidente Barack Obama sobre presuntos casos de espionaje contra autoridades mexicanas sea profunda, que concluya en un plazo breve, pero sobre todo que sus resultados permitan deslindar responsabilidades”.
En respuesta, el embajador de los Estados Unidos, Earl Anthony Wayne, dijó que su gobierno se toma muy en serio el caso sobre el presunto espionaje contra autoridades de otros países, pero no comentará públicamente cada uno de estos “alegatos”.
Sin embargo, aclaró que ambos gobiernos han dialogado sobre este tema mediante canales diplomáticos, en la ciudad de México y Washington, y el presidente Barack Obama ha asegurado que se continuará trabajando con las autoridades mexicanas sobre sus preocupaciones, indicó.
Recordó que durante la visita que realizó a México, el mes pasado, el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, dijo que no existía una relación que su país valorara más que la de México y el diplomático agregó que ésa es la relación más importante para su país.
Insistió que su gobierno no comentará individualmente cada noticia relativa a las actividades de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA por sus siglas en inglés) y recordó el mensaje que pronunció el presidente Barack Obama ante la Organización de Naciones Unidas (ONU).
“Hemos comenzado a revisar la manera como recolectamos inteligencia, de manera que tengamos un balance entre las preocupaciones legítimas sobre seguridad, de nuestros ciudadanos y aliados, y las preocupaciones sobre privacidad que toda la gente comparte”, declaró el mandatario estadounidense.
Wayne agregó que Obama se toma dichas declaraciones muy en serio, comprende las preocupaciones de sus contrapartes, y la de los ciudadanos mexicanos. “No existe una relación que valoremos más, que la que tenemos con México.
En una relación “tan amplia y compleja” como la de ambos países, siempre habrá retos y espacios para crecer y mejorar y enfatizó que, por ello, la interacción entre legisladores de ambos países no debe ser subestimada, ya que forma parte clave del trato bilateral.
Subrayó que los aproximadamente 500 millones de personas que viven en México y Estados Unidos y los tres mil kilómetros de frontera compartida brindan oportunidades ilimitadas para trabajar juntos.