Chilpancingo, Oct.23.- Ángel Aguirre Rivero anunció hoy aquí que presentará al Congreso del estado su solicitud de licencia al cargo de gobernador en Guerrero.
En un mensaje en Casa Guerrero, Aguirre Rivero recordó que tras los hechos ocurridos en Iguala, con los estudiantes normalistas de Ayotzinapa, había mencionado que “si mi separación del cargo ayudaba a resolver este asunto no habría objeción en ello”.
“Señalé también que mi obligación era actuar con responsabilidad en esta emergencia, responsabilidad que he encabezado hasta hoy”, puntualizó.
Refirió que ante este escenario de tragedia se niega a que el debate público se centre en si debe o no permanecer el gobernador en su encargo, y apuntó que la prioridad es continuar con la búsqueda de los jóvenes desaparecidos.
Dijo que decidió solicitar licencia “por todo ello y para favorecer un mejor clima político en la entidad, que dé pronta solución a las investigaciones del caso”.
Con fundamento en el artículo 84 de la Constitución de Guerrero, “he decidido solicitar licencia al Honorable Congreso del estado. Será el propio Congreso el que decida quien encabece este esfuerzo en los próximos meses”, precisó.
Antes, señaló que desde los hechos registrados en Iguala, los pasados días 26 y 27 de septiembre, su administración tomó medidas inmediatas para detener a los policías presuntamente relacionados con los hechos.
Aguirre Rivero agregó que también iniciaron la búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos y brindaron atención a todas las víctimas y a sus familiares.
Indicó que hoy presentó un informe detallado de las actuaciones realizadas por dependencias estatales para atender la tragedia.
“Convencido que las características de estos hechos obligaron una intervención del gobierno federal, de inmediato informamos a las instancias competentes y solicitamos su colaboración, sin que esto significara que dejáramos de trabajar para castigar a los responsables”, mencionó.
Aseguró que la autoridad debe continuar con la búsqueda de los jóvenes desaparecidos y garantizar castigo a quienes violaron sus derechos humanos.
Sin embargo, la percepción general es que la presión para que mandatario guerrerense se apartara del cargo venía creciendo por la indignación nacional e internacional que generó la desaparición de los 43 normalistas.
Los familiares y compañeros de los jóvenes exigían la renuncia de Aguirre Rivero por su falta de respuesta ante este caso y por no haber frenado la violencia del crimen organizado que azota a la empobrecida Guerrero, la región con los mayores índices de asesinato del país.
La dimisión llega un día después de que la Procuraduría General de la República (PGR) acusara al alcalde de Iguala y a su esposa, también elegido por el PRD, como principal sospechoso de ordenar el ataque contra los estudiantes, a quienes se sigue buscando por la región de Iguala.
Según las investigaciones, la pareja de esposos, que están prófugos, ordenaron a los policías municipales reprimir a los estudiantes, quienes después fueron entregados a sicarios del cártel de narcotraficantes “Guerreros Unidos”.
El alcalde está acusado de un homicidio desde 2013 y su cónyugue es hermana de tres poderosos narcotraficantes.