Sin un conteo oficial, miles de personas tomaron el Distrito Federal para marchar por la aparición de los 43 normalistas secuestrados en la ciudad de Iguala, y volvieron un caos las calles y avenidas de la capital mexicana, como de otras ciudades del país.
Con las expresiones como “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, el contingente saboteó el derecho de tránsito de los capitalinos debido a que la zona centro de la ciudad se convirtió en un gran estacionamiento por más de cinco horas.
Según autoridades, a las 16:00 horas de este miércoles los quejosos expresaron su desacuerdo ante los órganos de justicia a los cuales acusaron de “corruptos, mentirosos y lejos de la ciudadanía”.
Pasando por el Ángel de la Independencia, el contingente fue recibido por 43 muchachos encapuchados simulando a los normalistas desaparecidos, quienes circundaron el monumento nacional, acaparando la atención de los medios de comunicación.
De manera pacífica pero con algunos conatos de violencia, los ciudadanos representados por unas miles de personas, expresaron su desacuerdo por los hechos violentos ocurridos en el estado de Guerrero a finales del mes de septiembre.
Anterior a la marcha y como parte de las actividades de la Jornada Global por Ayotzinapa, líderes universitarios formaron un cerco en las afueras de la Procuraduría General de la República (PGR) con la finalidad de presionar a la institución a que encuentre con vida a los 43 normalistas desaparecidos.
Alrededor de las 10:00 horas de la mañana, el contingente de por lo menos 50 estudiantes se congregó y rodeó el edificio ubicado en Paseo de la Reforma 211-213, casi esquina con Insurgentes Centro, por lo que el carril lateral derecho de la importante vía fue cerrado al tránsito vehicular.
En tanto, desde las 18:00 horas de este martes, representantes de diversas religiones en el país comenzaron a realizar una “vigilia” de 43 horas en el Zócalo, en nombre de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, misma que concluirá a las 13:00 horas del presente día.
Sin consumir ningún tipo de alimento, y sustentándose de agua solamente, los religiosos continuaron su protesta con la instalación de veladoras durante cada noche que dure el ayuno, además montaron una ofenda que “es vigilada” para evitar que sea retirada por la autoridad.
Cabe recordar que la Asamblea Interuniversitaria informó que durante la Jornada Global por Ayotzinapa se sumaron al paro nacional de 72 horas, 115 escuelas, encabezadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Instituto Politécnico Nacional (IPN) y Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Finalmente, jóvenes pertenecientes a escuelas media superior, bachilleratos y vocacionales se apostaron en la caseta México-Cuernavaca, permitiendo el paso libre de los automovilistas, mientras otros hicieron los mismo en diversas estaciones del Metro.