En las manifestaciones que se han efectuado, tanto en Guerrero como en la Ciudad de México en contra de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, las han encabezado los padres de los normalistas, apoyados por estudiantes e integrantes de diferentes organizaciones.
La efectuada este sábado, una de las más numerosas y conflictivas hasta ahora, fue la del contingente que partió por la tarde del Ángel de la Independencia, en medio de consignas como "¡No están solos!" y "¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!".
Los manifestantes también portaron pancartas contra el gobierno federal y con mensajes alusivos a que la ciudadanía seguirá exigiendo justicia en el caso de los estudiantes desaparecidos.
En principio, los organizadores buscaban que la marcha llegara al Zócalo capitalino.
Sin embargo, el gobierno del Distrito Federal negoció con ellos y les pidió cambiar su ruta, debido a la pista de hielo y a los adornos que se están instalando en la plancha por las fiestas de fin de año.
La marcha coincidió con el 100 aniversario de la entrada de Emiliano Zapata y Francisco Villa a la Ciudad de México, en el marco de la Revolución Mexicana.
Esta protesta también ocurre en medio de la controversia que han generado manifestaciones anteriores, en las cuales, al final de encuentros pacíficos, decenas de personas -algunas de ellas encapuchadas- han provocado disturbios y enfrentamientos con la policía capitalina.
Dentro de estos hechos, se han registrado daños a comercios y detenciones, que familiares de los detenidos y activistas han descrito como arbitrarias, y con un uso desproporcionado de la fuerza por parte de los cuerpos de seguridad.
Lo que originó, la víspera, que el jefe de gobierno del Distrito federal, Miguel Ángel Mancera, aceptara la renuncia del secretario de Seguridad Pública local, Jesús Rodríguez Almeida.
Al respecto, Mancera agregó que en días próximos dará a conocer a su sustituto, cuyo nombramiento debe ser ratificado por el presidente Enrique Peña Nieto, debido a que el DF es sede de los poderes federales.
Protesta campesina
Un día antes, el viernes, cientos de campesinos realizaron también en el DF una protesta por la desaparición de 43 estudiantes en Guerrero, donde también hubo una marcha.
En la manifestación campesina que se desarrolló en la capital del país desfilaron 43 tractores en honor a cada uno de los estudiantes desaparecidos en la ciudad de Iguala, cuyas fotos se exhibían sobre las carrocerías de los vehículos.
"Nos solidarizamos con el movimiento social para reclamar al gobierno por los 43 estudiantes, para que los recuperemos con vida. El gobierno no ha hecho nada", dijo una de las marchistas.
Acompañados de una banda de música ranchera, los manifestantes se desplazaron por la transitada avenida de Paseo de la Reforma hacia la secretaría de Gobernación, donde trataron de derribar las vallas dispuestas por cientos de policías para impedirles el paso.
Momentos en que, el secretario de la dependencia, Miguel Ángel Osorio Chong, informaba que un general del ejército, integrante de las tropas desplegadas en Iguala para buscar a los jóvenes, coordinará a todas las fuerzas de seguridad -federales, estatales y municipales- de Tierra Caliente, que Guerrero comparte con sus estados vecinos de Michoacán, Morelos y Estado de México.
Los operativos en la zona, donde son frecuentes los secuestros, asesinatos, enfrentamientos armados y hallazgos de fosas clandestinas, deben darse "de manera plena, y que no, los límites de un estado con otro, nos hagan detener la estrategia de seguridad", dijo Osorio Chong.
De manera casi simultánea a la manifestación en Ciudad de México, pero en el municipio de Ayutla, Guerrero, unas 300 personas marcharon para exigir la localización de los estudiantes.
El gobernador interino, Rogelio Ortega, se unió al acto y ofreció a los familiares de los jóvenes una mesa de diálogo para el 11 de diciembre.
Ortega asumió la gobernatura luego que su antecesor, Ángel Aguirre, dejara el cargo ante la crisis que desató este caso.
Mientras jóvenes con el rostro cubierto tomaron desde temprana hora de este sábado la caseta de peaje de la autopista México-Cuernavaca dando paso libre a cambio de una cooperación “voluntaria”.
Una serie de movilizaciones multitudinarias se han registrado durante las últimas semanas en la capital del país y en otras ciudades, para exigir la localización de 43 estudiantes de la escuela rural para maestros de Ayotzinapa, quienes desaparecieron el 26 de septiembre tras una balacera ordenada por el alcalde de Iguala.
El ataque fue perpetrado por policías municipales coludidos con el crimen organizado, y según las investigaciones, los jóvenes pudieron haber sidos masacrados.