La noticia dada por el embajador de México en Estados Unidos, Manuel Medina Mora, de que Petróleos Mexicanos (Pemex) importaría en 2015 hasta 100 mil barriles diarios de Estados Unidos, para mezclarlos con nuestro petróleo, y mejorar así el proceso de refinación, ya la corroboró Pemex.
Se asegura, que ante la oportunidad comercial que representa el incremento significativo de producción de crudos ligeros en la Unión Americana y la reconfiguración de los sistemas de refinación de nuestro país, el año pasado Pemex presentó a la Oficina de Industria y Seguridad, del Departamento de Comercio de EU, una propuesta de intercambio de petróleo crudo.
Las negociaciones continúan, sin embargo, según un despacho de la agencia Reuters, el intercambio comercial comenzaría entre finales de febrero y principios de marzo de este año.
Conforme a la petición, México importaría hasta 100 mil barriles diarios de crudos ligeros y condensados del país vecino, para hacer una mezcla con nuestro petróleo y mejorar así el proceso en las refinerías de Salamanca, Tula y Salina Cruz, las cuales tienen configuración cracking, a cambio de la exportación de crudos mexicanos pesados para ser procesados en las refinerías estadunidenses de alta conversión coking.
Esto, se asegura, no representa un compromiso adicional a los 803 mil barriles diarios de crudo mexicano que se exportaron en promedio a Estados Unidos el año pasado.
El gobierno mexicano requiere 100 mil barriles diarios de petróleo ligero para combinarlo con el pesado y con ellos producir más gasolina.
México tiene seis refinerías y tiene que hacer una mezcla entre el petróleo “Maya”, que es el petróleo pesado, con parte del petróleo ligero que es el “Istmo” y el “Olmeca”, se hace una mezcla y con eso se producen las gasolinas.
Indudablemente que la utilización de crudos ligeros para la producción de petrolíferos, en particular de gasolinas, tiene muchas ventajas, los petróleos ligeros son más productivos que los pesados.
Si se ocupara puro petróleo ligero la producción de gasolina sería mayor.
Para Pemex, el acuerdo que permitiría maximizar el margen de refinación, de acuerdo con la configuración de las refinerías de cada país, además del intercambio, fortalecería las relaciones comerciales México-EU en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, además de obtenerse una mayor eficiencia logística en términos de menores costos de transporte, uso preferente de transporte marítimo hacia México y reducción del transporte terrestre en suelo estadounidense.
En específico, se señala que los beneficios principales para México sería lograr una mayor producción de gasolina y diesel, una menor producción de combustóleo y de petrolíferos con alto contenido de azufre en el Sistema Nacional de Refinación (SNR), así como una mejor utilización de la capacidad instalada del SNR.
A cambio, nuestro país exportaría crudo Maya (pesado) para ser
procesado en las refinerías estadunidenses de alta conversión.
Menor producción la causa
Las últimas cifras disponibles al mes de noviembre de 2014 revelaron que Pemex Exploración y Producción (PEP) distribuyó ese mes a las diferentes refinerías del país un total de un millón 79 mil barriles diarios de petróleo crudo, cifra menor a la de abril, que alcanzó un millón 257 mil barriles.
La disminución se debió a una menor distribución tanto de crudo pesado como ligero. Lo interesante es que la entrega de petróleo ligero bajó en total 111 mil 851 barriles diarios al pasar en abril de 726 mil 843 barriles a 614 mil 992 barriles en noviembre.
Las tres plantas mencionadas, son precisamente las que más crudo ligero utilizan en sus procesos de producción combinado con el petróleo pesado.
En el mes de noviembre la refinería de Tula utilizó 176 mil 465 barriles de aceite ligero y 46 mil 58 barriles del pesado; la de Salamanca usó 113 mil 149 barriles y 18 mil 491 barriles y la de Salina Cruz 187 mil 9 barriles y 85 mil 147 barriles, respectivamente.
De esta forma, en la refinería de Salina Cruz se produjeron en igual mes 96 mil 349 barriles diarios de gasolinas; en Salamanca 41 mil 900 barriles diarios y en Tula 70 mil 505 barriles diarios.
Pemex asegura que las tres refinerías cuentan con una configuración cracking para procesar la mezcla de petróleo mexicano pesado con el petróleo ligero de Estados Unidos.
Acres críticas
Tras el anuncio hecho porPemex en el sentido de que propuso intercambiar crudo con Estados Unidos, la lluvia de críticas fue intensa, como la declaración de la senadora Dolores Padierna, vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, en el Senado de la República, quien expresó que “esto es algo sumamente preocupante y grave porque México es un país petrolero que ahora se dedicaría a importar petróleo, lo cual resulta una aberración energética".
Dijo que es un negocio que no le va a ayudar a México.
“Es un negocio que le ayuda sólo a Estados Unidos porque vive un boom petrolero de la producción de ´Shale´ que está afectando sensiblemente los precios del petróleo y aunque sigue dependiendo de las importaciones de México, Canadá, Arabia Saudita y Venezuela que son los países que le venden petróleo a EU, pretende ahora hacer negocio con México convirtiéndolo en su mercado de la realización de los nuevos petróleos que está produciendo a través del fraking”, afirmó.