El secretario mexicano de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, dijo hoy que el país avanza en seguridad y que puede “mostrarlo”, después de que el Instituto para la Economía y la Paz situara a México entre las naciones más violentas del mundo.
Al ser interrogado sobre el Índice Global de Paz, elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz fundado por el empresario y filántropo australiano Steve Killelea, que ubicó a México en el lugar 144 de una lista de 162, Osorio aseguró que el país registra una “disminución significativa” de delitos como el secuestro y la extorsión.
El ministro aludió a la disminución no sólo del número de muertes, sino a “la tranquilidad que se ha venido logrando” en estados como Nuevo León, Chihuahua, Baja California, Coahuila, Durango, Veracruz, San Luis Potosí, Michoacán y Zacatecas.
Se ha registrado un descenso “en el secuestro de más de 40 por ciento”, así como de la extorsión “en más de 60 %”, apuntó al destacar que la reducción de los delitos “está validada incluso hoy por la sociedad civil”.
Sobre los cárteles de las drogas, dijo que las autoridades han acabado “con los líderes, con los segundos, con los terceros y con muchos de sus integrantes”.
“Hemos lastimado su movilidad económica y territorial, pero por supuesto que quedan delincuentes y tenemos que seguir avanzando; tenemos que seguir enfrentándolos en Michoacán y en otros estados del país”, aseveró Osorio.
Según el indicador mundial publicado el miércoles, Colombia (146), México (144) y Venezuela (142) son los países más violentos de Latinoamérica, mientras Chile (29) y Uruguay (44) son los más pacíficos.