El director corporativo de Finanzas de Petróleos Mexicanos (Pemex), Mario Alberto Beauregera Álvarez, señaló que ante la reducción del pago de impuestos y derechos de Pemex a la federación, así como la caída del precio del crudo, es
deseable que el régimen fiscal que se aplique a la empresa sea comparable con el de otras empresas de su tipo, a fin de que la reforma energética rinda todos los beneficios esperados.
Expuso que aunque a partir del 1 de enero de 2015 a Pemex se le aplica un nuevo régimen fiscal más alineado con el resto de la industria, no todos los participantes de la industria del petróleo y gas en el país cuentan con las mismas reglas del juego, y esto es un elemento indispensable para que esta reforma logre su objetivo..
Precisó que Pemex, a diferencia de otras empresas, aún no puede deducir la totalidad de sus costos y gastos de operación en el cálculo de impuestos y derechos.
En particular, explicó, al fijarse el costo máximo a deducir como un porcentaje del precio, cuando éste baja, se reduce el monto de costos que es deducible.
Los costos de producción reales, sin embargo, no bajan en la misma proporción que los precios del crudo, lo que da lugar a una compresión de los márgenes de operación de la empresa, expuso.
Como consecuencia, dijo, “durante el primer trimestre de 2015 el pago de impuestos y derechos representó 212 por ciento del rendimiento de operación al llegar a 103 mil millones de pesos, siendo el caso que en el periodo comparable de 2014, el pago de impuestos y derechos representó 116 por ciento del rendimiento de operación.
En resumen, abundó, entre el primer trimestre de 2014 y el mismo periodo de 2015 se tuvo una reducción de 34 por ciento en ventas y una reducción de sólo cuatro por ciento en el costo de lo vendido y los gastos generales de Pemex.
Acompañado por los directores operativo, Gustavo Hernández García, y Jurídico de la petrolera, Marco Antonio de la Peña Sánchez, el funcionario indicó que esto se tradujo en una reducción de 73 por ciento en el resultado de operación.
Además, continuó, el costo financiero, producto de la variación del tipo de cambio, se multiplicó más de seis veces, el rendimiento antes de impuestos y derechos se redujo 98 por ciento.
Dado que el pago de impuestos y derechos sólo se redujo 51 por ciento, precisó, el rendimiento neto, esto es, la pérdida neta en el trimestre ascendió a 101 mil millones de pesos.
El funcionario también mencionó que la deuda financiera de Pemex aumentó 136 mil millones de pesos, la reserva para beneficios a empleados se incrementó en 20 mil millones y otros pasivos aumentaron en 10 mil millones de pesos.
Lo anterior, añadió, fue parcialmente compensado por una disminución en el pasivo a proveedores de 64 mil millones de pesos.
Como resultado, acotó, el pasivo al 31 de marzo de 2015 ascendió a tres billones de pesos, de los cuales 50 por ciento corresponde al pasivo laboral.
Durante el primer trimestre de 2015, Pemex y Pemex Comercio Internacional (PMI) realizaron actividades de financiamiento por un total de 175 mil millones de pesos, en tanto que las amortizaciones fueron de 56 mil millones y el impacto en el crecimiento de la deuda por variación cambiaria fue 19 mil millones.
El director corporativo de Finanzas de la empresa enfatizó que el patrimonio se redujo en 86 mil millones de pesos durante los primeros tres meses de este año, debido fundamentalmente al resultado del ejercicio de menos 101 mil millones de pesos.
“El resultado del primer trimestre equivale a prácticamente dos terceras partes del balance financiero autorizado en la Ley de Ingresos de la Federación, que es 155 mil millones de pesos”.
Al responder a los legisladores, dijo que la caída del precio del petróleo fue un fenómeno mundial que nadie predijo y señaló que para cumplir con el balance financiero reducirán sus gastos, “el problema es que en su mayoría son en inversión”.
Derivado de la reforma energética, existe una reorganización corporativa para participar en un nuevo entorno, donde habrá más competidores y una industria petrolera global, abundó.
Por ello, expuso, buscarán maximizar y generar valor, porque es mandato constitucional que permita a Pemex entregar renta petrolera al Estado, “comprender que ya no es un monopolio y se va a enfrentar a mercados en competencia”.
Explicó que se aplazó el inicio de los proyectos programados para no que no impactaran el presupuesto de 2015, donde se tiene la restricción del balance primario, mientras que los proyectos en ejecución se desarrollan a menor ritmo para asegurar que se cumpla la meta, como lo estipula la ley.
Mencionó que los cambios en el régimen de la empresa permitirán tener mayor transparencia y mejor manejo de las actividades de exploración, explotación, distribución o transportista.
El director jurídico Marco Antonio de la Peña señaló que las modificaciones que se hicieron a la ley permitirán a Pemex contraer alianzas y asociaciones con terceros para contar con tecnología que atraiga inversiones. Ahora se cuenta con contrataciones más flexibles y adecuados al régimen petroleros a nivel nacional e internacional, sostuvo.
A nombre del Partido Revolucionario Institucional, la diputada Cristina Ruíz Sandoval mencionó que de 2004 a 2012, la producción de crudo descendió más de 25 por ciento, y las reservas de petróleo de 1999 a la fecha se han reducido 23 por ciento.
Abundó que el alto costo de los energéticos en México representa una desventaja competitiva, que no permite generar empleos y limita la inversión en el sector.
El diputado Juan Bueno Torio, de Acción Nacional, expresó “que esta situación de Pemex a todos nos preocupa y entendemos que buena parte del problema se viene reflejando por la caída de los precios” del petróleo.
El presidente de la Tercera Comisión, Ernesto Cordero Arroyo, celebró que en la empresa productiva se trabaje para una reforma administrativa, ya que tan sólo en gastos de administración 2013 a 2014 se registró un aumento de 12 mil millones de pesos. “Ojalá se instauren controles para poner en orden el gasto de la empresa”.