Una red de corrupción operó en la delegación Cuauhtémoc, durante la gestión de Alejandro Fernández y José Luis Muñoz Soria, bajo cuyo mandato algunos funcionarios cobraron millones de pesos por autorizar reglamentos y dar permisos, reveló el delegado electo Ricardo Monreal.
Mientras los exjefes delegacionales Alejandro Fernández y José Luis Muñoz Soria estuvieron al frente de la demarcación, se cobraron seis millones 900 mil pesos por autorizar reglamentos, dos millones a restaurantes, hoteles, casas de cita, bares y otros locales, y 700 mil pesos de comerciantes informales, dio a conocer Monreal .
El delegado electo informó que días después del triunfo del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), las autoridades perredistas se deshicieron de toda la documentación oficial que comprometía a los exdelegados.
Pero miembros de su equipo registraron el momento en que inspectores afines a Fernández y Muños, así como a la delegada Jimena Martín del Campo Porras, echaban en camiones de basura la papelería.
Las personas afines a Monreal recuperaron las bolsas con 58 mil 654 fijas rotas, juntaron cada uno de los pedazos y descubrieron información que constituye diversos delitos como ejercicio ilegal del servicio público, robo, abuso de confianza, administración fraudulenta, daño a la propiedad y cohecho, entre otros, de acuerdo con el integrante de Morena.
“Frente a esta situación de desorden, caos e impunidad en la delegación, presentaré denuncias penales contra los exdelegados y servidores públicos actuales que están incurriendo en conductas inmorales y antijurídicas. No vamos a negociar”, dijo el delegado electo en un video que subió a su cuenta de Facebook el 16 de julio.
Por otro lado, se pudo comprobar que 122 personas cercanas a Fernández y Muñoz Soria aparecían en la nómina, con salarios mensuales que sumaban más de 3 millones 400 mil pesos.
Entre las personas que figuran en la lista se encuentran familiares, concubinas, amigos y exesposas. Alma Fernández, hermana de Alejandro, aparece como encargada de la Casa del Sordo en la Territorial Obrera-Doctores, mientras su prima Vanesa Infante Ramírez es la secretaria particular de la delegada, con un salario superior a los 38 mil pesos.
Entre los parientes de Muñoz se encuentra su concuño, asesor de Participación Ciudadana con un salario de 31 mil pesos, su hija Juana María Muñoz, trabajadora de base con sueldo de 8 mil 500; su hijo Canek, con un sueldo de 5 mil 500 pesos y su esposa Verónica Olvera, que gana poco más de 48 mil pesos como directora general de Desarrollo Social.