Marcharán el jueves 26 de mayo, del Ángel de la Independencia al Zócalo de la ciudad.
En lugar de dar solución a las demandas antorchistas, el gobierno de Mancera orquesta violenta represión en contra de quienes fueron desalojados junto con sus 300 familias, debido a que sus viviendas resultaron demolidas por la administración mancerista el pasado 5 de febrero, en el predio La Ciénega, en Tláhuac, propiedad legítima de sus moradores, para favorecer a la transnacional Walmart y cuyos habitantes viven desde entonces debajo de una lona.
Además el gobierno de la ciudad se opone a conectar la red eléctrica, construcción ya concluida en Tiziclipa, Xochimilco. Esta obra de electrificación fue terminada hace un año, fruto de las gestiones del Movimiento Antorchista, que tuvo un costo de casi siete millones de pesos, para beneficio de más de mil familias.
Otra demanda muy sentida por el antorchismo es la construcción de la secundaria Wenceslao Victoria Soto en la delegación Gustavo A. Madero, donde el gobierno de la Ciudad tiene secuestrado, desde hace cuatro años, seis millones de pesos destinados a esta institución, dinero federal gestionado por el movimiento.
También exigen que no haya más destrucción de la Cd. Deportiva Magdalena Mixhuca, no a la privatización, alto a la tala de árboles, y regresarle el concepto de bosque con valor ambiental; además del cambio de uso de suelo a colonias de Tláhuac, Milpa Alta, Tlalpan y Xochimilco, varias de ellas con dictamen positivo, es decir, con estudios hechos por los especialistas de Desarrollo Urbano que consideran viable la regularización de estos predios, ocupados en su mayoría desde hace más de 20 y 30 años.
El gobierno de la Ciudad no mueve un solo dedo, ni le interesa resolver este problema, impidiendo la entrada de los servicios de agua, drenaje y electrificación; quitándoles a estas familias su derecho como ciudadanos, sólo en época de elecciones se acuerdan de ellas, porque, entonces sí, son votos para los gobernantes.
Por lo que los antorchistas se ven en la imperiosa necesidad de salir nuevamente a las calles a manifestarse el próximo jueves 26 de mayo; marcharán del Ángel de la Independencia al Zócalo de la ciudad para exigir la solución largamente esperada a sus demandas.