En el caso de que existiera un diálogo entre el Partido de la Revolución Democrática y el partido de Movimiento de Regeneración Nacional, para una posible alianza electoral debe darse con respeto mutuo y sin condicionamientos, “no como si Andrés Manuel López Obrador fuera Dios que perdonará los pecados de los demás” así lo aseguró el
presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva.
“Nosotros no vamos a aceptar condicionamientos para sentarnos a platicar con López Obrador, como si fuera el único bueno existente en el país y que los otros, según él, cometimos errores o nos hemos aliado hasta ser parte de la mafia en el poder, y que si nos arrepentimos seremos perdonados para entrar al reino del Señor”, indicó.
En entrevista sobre las declaraciones de AMLO, el diputado presidente aseveró que el Sol Azteca siempre ha estado a favor de un diálogo constructivo con todas las fuerzas políticas para buscar la creación de un amplio frente opositor que permita lograr los cambios que el país necesita.
También destacó que el líder nacional de Morena ya tiene en su slogan “atacar a los demás, faltar el respeto a los demás, con eso de que son parte de la mafia del poder”, no obstante, Zambrano Grijalva que a su partido “no le queda el saco”.
“Nosotros no somos, ni hemos sido, ni seremos, de ninguna manera, parte de lo que él (López Obrador) llama la mafia del poder y mucho menos sus súbditos, sus empleados, como lo ha dicho insultantemente en otras ocasiones”, agregó.
Por otra parte, el diputado perredista recordó que la línea política del PRD plantea sentarse a platicar con otras fuerzas y construir frentes amplios opositores, sin condicionamientos, “sobre la base de programas que acordemos, que lo logremos de manera común y que se pongan sobre la mesa todos los elementos a nuestros alcances”.
Por último, el legislador del Sol Azteca, reconoció que el hecho de que López Obrador hubiera abordado la posibilidad de una eventual alianza entre ambos partidos, es un reconocimiento de que Morena no puede ir solo para contener al PRI y perder las elecciones presidenciales del 2018.
“Hoy difícilmente una fuerza, por si sola, puede ganar, por eso nosotros hemos construido alianzas, las construimos cuando él fue nuestro candidato (presidencial) en 2012”, finalizó.