El secretario del Trabajo y Previsión Social (STPS), Alfonso Navarrete Prida, manifestó que frente a la volatilidad internacional, la reforma en materia de justicia laboral se convertirá en la mayor defensa de la planta productiva nacional.
Al encabezar la primera sesión extraordinaria de 2016 de la Conferencia Nacional de Secretarios del Trabajo (Conasetra), donde fue reelecto por unanimidad como presidente, destacó que como parte de la iniciativa presidencial para una reforma de la justicia cotidiana en México, los cambios en el ámbito laboral son urgentes, si se toma en cuenta que existe un "atraso institucional enorme" en las juntas de Conciliación y Arbitraje, tanto federal como locales.
Sostuvo que las controversias laborales que se atienden en esas instancias duran entre cuatro y cinco años, debido a que cada abogado lleva en promedio hasta 200 casos, lo que se ha traducido en que los laudos tarden mucho en emitirse y por ello no exista justicia pronta y expedita en estos asuntos.
A lo anterior se suma que en las Juntas no existe una representación real de los empresarios y de los trabajadores, lo que no ayuda a las planta productiva ni a los empleados que promueven quejas por violación a sus derechos laborales, abundó.
El secretario del Trabajo indicó que aumentar los recursos económicos a las Juntas tampoco contribuye a resolver el problema de la lentitud de la justicia laboral.
Rechazó que la reforma vaya a cancelar el sistema tripartita en el ámbito laboral mexicano, el cual -afirmó- ha dado excelentes resultados en el diálogo social para la resolución de conflictos y toma de decisiones.
También rechazó que atente contra el derecho a huelga o vulnere los derechos de los trabajadores o de los sindicatos, pues dijo que por el contrario, refuerza el carácter tutelar de los mismos y es un apoyo para acabar con los sindicatos patronales o de protección.
En este contexto, pidió a los integrantes de la Conferencia Nacional de Secretarios del Trabajo que a la brevedad envíen a este órgano sus análisis técnicos sobre la iniciativa de reforma de justicia laboral.
En otro tema, el titular de la STPS calificó como "deuda social" el asunto de un eventual incremento al salario mínimo y reconoció al jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, por haber colocado e impulsado el debate nacional sobre este asunto.
Sin embargo, dijo que hay diferencias en la forma llevar a cabo esta propuesta y reiteró que esto deberá darse por consenso de todos los involucrados y no por decreto unilateral de ninguna de las partes.