Después de que el Presidente de México, Enrique Peña Nieto invitara y se reuniera con el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, legisladores de diferentes bancadas en San Lázaro y el Senado mexicano rechazaron categóricamente la acción y afirmaron que no era bienvenido en el país debido a sus
constantes declaraciones ofensivas hacia los mexicanos.
En ese sentido, en conferencia de prensa, el senador perredista Miguel Barbosa Huerta anunció que la bancada propondrá declarar persona non grata a Donald Trump.
“Donald Trump ha basado su estrategia de campaña en la ofensa, el denuesto, el racismo, la xenofobia y la discriminación de los mexicanos y latinos con el propósito de atraer y exaltar el espíritu más conservador del pueblo americano” comentó.
Sobre la invitación de Peña Nieto, Barbosa Huerta lamentó que el Gobierno mexicano sólo haya dado declaraciones, posiciones tímidas y ningún reclamo formal. “Tal parece que el miedo del Gobierno mexicano a la nación americana también incluye a sátrapas como Donald Trump. La visita de Donald Trump a Los Pinos como invitado de Enrique Peña Nieto es una falta de solidaridad del Presidente con el sentir de los mexicanos” agregó.
Al coincidir con que el simple saludo entre el Presidente de México y el político estadounidense es un insulto, “una afrenta para los mexicanos” el coordinador de los diputados panistas, Marko Cortés Mendoza, afirmó que la visita de Trump sin antes haber ofrecido disculpas a los mexicanos por sus desafortunadas expresiones racistas, es inaceptable.
"Donald Trump no es bienvenido mientras mantenga su propuesta de construir un muro entre México y Estados Unidos; la relación entre dos naciones vecinas debe basarse en el diálogo y el respeto, no en el odio", comentó.
En conferencia de prensa aparte, la coordinadora de diputados de Morena, Rocío Nahle García, reprobó que el Presidente cayera en el “sirvientismo” al invitar al país a Trump, porque se trata de un hecho indignante para todos los mexicanos, tras las constantes ofensas al país.
“Se ha confundido por parte del Gobierno Federal el servilismo con el ‘sirvientismo’. Es increíble que le esté haciendo el caldo gordo prácticamente a un personaje que viene en picada en las encuestas en Estados Unidos”, reclamó.
La Coordinadora de la bancada de Morena afirmó que es un gran desacierto del Presidente Enrique Peña Nieto el haber invitado a Donald Trump a sostener un encuentro en privado, ya que se trata de un personaje considerado como non grato, porque se ha dedicado a insultar al pueblo de México y sus expresiones xenofóbicas no pueden ser perdonadas.
“No es posible que el Ejecutivo Federal se preste para que Trump venga a mover los reflectores internacionales a un pueblo ofendido. El Presidente se tenía que haber esperado a que pasaran las elecciones para hacer cualquier movimiento”, apuntó.
Por su parte, el coordinador de Movimiento Ciudadano en San Lázaro, Clemente Castañeda Hoeflich, afirmó que la acción de Peña Nieto pone en ridículo a la política exterior del país.
“Podemos entender cuál es la acción y qué mueve a Trump para reunirse con Peña, pero no podemos entender por qué el presidente se presta a una reunión de esta naturaleza”, advirtió Castañeda.