México se encuentra en una difícil situación. La gestión económica del gobierno en estos últimos cuatro años, la incertidumbre derivada de la elección presidencial de los Estados Unidos y del nuevo entorno internacional, la debilidad crónica del Estado de derecho y la corrupción estructural han debilitado profundamente las expectativas y la confianza sobre la economía mexicana, ante ello.
En este contexto, los Senadores del PAN propusieron un plan de responsabilidad económica, dijo Jorge Luis Lavalle en entrevista con El Punto Crítico.
Para enfrentar el difícil panorama económico y la debilidad del Estado de Derecho, que han debilitado profundamente las expectativas y la confianza sobre la economía mexicana, indicó.
En entrevista con este medio, el senador indicó que el Plan de Responsabilidad Económica exige que no se pueda gastar más de lo autorizado. Entre 2012 y 2016 el ejercido es 8% mayor al aprobado.
Entre las medidas que plantearon se prevé la eliminación de la Sedatu, Caminos y Puentes Federales (Capufe), la Procuraduría y Tribunales agrarios, asimismo se contempla la fusión de las secretarías de Economía, Turismo y Energía para formar la nueva Secretaría de Economía con un 50% del presupuesto total de las 3 juntas.
Es necesario gastar menos que nuestros ingresos para dejar de recurrir al endeudamiento y cumplir la meta de superávit primario establecido en el Paquete Económico para el 2017, señalaron los legisladores.
Por ello presentaron diez medidas para enfrentar la crisis, las cuales lograrían un ahorro con respecto a lo presupuestado de 343 mil 897 millones de pesos, entre las que se encuentran:
Se propone un ahorro que sumado a los 239,094 millones de pesos de los excedentes de Banxico sumarían 582,991 millones de pesos, equivalentes a 2.91 puntos del PIB (punto base PIB 200 mmdp) que serían utilizados para disminuir la deuda del país.
Los panistas señalaron que la disminución de la deuda tendría un efecto positivo sobre nuestro tipo de cambio así como sobre la calificación crediticia del país, lo cual no solo generaría una disminución en el costo financiero sino también se vería reflejado en los costos de todos los productos que importamos para consumo interno, entre estos los combustibles fósiles.
Se trata también de cerrar las puertas abiertas a la ineficiencia en el gasto y la corrupción, apuntaron los legisladores.