El presidente del Senado de la República, Ernesto Cordero, consideró que ante el logro de una estabilidad económica es necesario fortalecer el ingreso familiar y su patrimonio financiero neto, con el fin de acercarnos al nivel de otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
Durante el 4º Congreso Nacional de Familia y Desarrollo Humano, el senador refirió que, de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, el 35 por ciento de los recursos familiares se destinan a alimentos, bebidas y tabaco; 19 por ciento a transporte y sólo 12 por ciento a servicios de educación.
Esta realidad, agregó, debe ser uno los retos a estudiar desde un enfoque acorde con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ya que es desde la perspectiva familiar como se pueden atender mejor las causas de la pobreza, la desigualdad entre hombres y mujeres o la difícil situación que viven personas con discapacidad y personas mayores.
El presidente de la Mesa Directiva asentó que este Congreso debe ser una iniciativa para incentivar el diálogo entre poderes y órdenes de gobierno, a fin de elevar los estándares de protección a las familias mexicanas en favor del desarrollo sostenible.
Se trata, continúo Cordero, de un espacio de diálogo e intercambio de ideas que permitan vislumbrar los retos que enfrentarán las familias mexicanas en el futuro próximo, como es el mejoramiento de los mecanismos para resolver los conflictos que derivan de las relaciones familiares con la próxima discusión del Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares.
Al inaugurar el 4º Congreso Nacional de Familia y Desarrollo Humano, el vicepresidente de la Mesa Directiva, César Octavio Pedroza Gaitán dijo que la familia es la esperanza de la edificación de un mejor país y de la sociedad en su conjunto.
Para el Senado, señaló, es un tema estructural en donde descansa y debe descansar la conformación y edificación de políticas públicas que deben establecer ruta para el país; es y debe ser la palanca para combatir los flagelos que lastiman a la sociedad no sólo en México sino en el mundo entero.
La familia es una dualidad de trascendencia, ya que hacia afuera es un cimente de la sociedad y hacia adentro es el fermento propicio para la formación de los individuos.
El presidente de la Comisión de la Familia y Desarrollo Humano, José María Martínez Martínez, precisó que la familia vive un proceso de descomposición generado por el desempleo que golpea a los padres, por la inseguridad y violencia que amenaza su entorno, las adicciones que arrebatan a los jóvenes, la violencia intrafamiliar, la migración, los desplazamientos, y el "selfimismamiento" generado con el uso de los teléfonos celulares.
Se requiere un esfuerzo institucional transversal que involucre a todos los órdenes del gobierno, y por este motivo es que este Congreso busca armonizar los compromisos internacionales con los principios constitucionales y la legislación secundaria para diseñar políticas públicas que hagan que los más de 31 millones de hogares del país vivan mejor.
Por ello, se enmarcaron los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU con los de la Comisión, en temas como el fortalecimiento a los cuidados paliativos que deben recibir los integrantes de una familia, la integración de las personas adultas a la vida laboral, la erradicación del maltrato infantil y de la violencia de género, así como lo relativo a la adopción, donde los congresos locales y ayuntamientos son fundamentales, por sus atribuciones e incidencia en el desarrollo y bienestar de cada uno de sus habitantes.
La familia, puntualizó, debe ser el núcleo de toda política pública, porque si la entendemos como el espacio donde se fortalece México, no habrá pretexto para que la política pública beneficie a todos los mexicanos, ya que fortalecerla es fortalecer a México.
La senadora Lisbeth Hernández Lecona, secretaria de la Comisión, coincidió al señalar que el país tiene grandes desafíos en materia de protección de la familia. Recordó la resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU 2015 sobre este tema, en donde expresa su preocupación por que las condiciones hayan empeorado para muchas familias debido a la crisis económica y financiera, falta de seguridad en el empleo e ingresos irregulares.
Indicó que se ha exhortado a los gobiernos Federal y locales para que se revisen los programas nacionales, estatales y municipales de desarrollo que puedan contar con una perspectiva de familia, y agregó que con la celebración del "Día de la Familia", se ha buscado hacer conciencia y procurar que los valores éticos y morales se guarden y fortalezcan dentro de este núcleo.
Este núcleo, dijo, debe verse como prioridad en los estados democráticos y en consecuencia fomentar el diseño de implementación de un marco jurídico que permita protegerla y la asista con políticas públicas transversales que hagan efectivos los derechos que se busca fomentar en ella.
Por lo tanto, es importante que los principios y valores se inculquen en la primera infancia y sobre todo en matrimonios cuidadosos de que sus hijos puedan crecer en un buen desarrollo humano.
En el 4º Congreso Nacional de Familia y Desarrollo Humano, se llevó a cabo la conferencia magistral "El Estado Constitucional y la Protección de la Familia, a cargo del ex ministro de Justicia del gobierno de España, Alberto Ruiz-Gallardón.
Además, en tres paneles se analizaron los retos de la Agenda 2030, la reforma constitucional y los desafíos del Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares, así como los avances de las comisiones de Familia y Desarrollo Humanos en las entidades federativas.