Para revertir la inseguridad, la violencia y la impunidad es necesario recuperar
un esencial respeto por la legalidad, consideró el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.
Tras recibir la Presea "Benito Juárez", en reconocimiento por su trayectoria, dijo que una de las prioridades actuales que se tienen que asumir como país es lograr que México sea tanto formal como materialmente un Estado y sociedad de derechos.
Durante su intervención, reiteró que los principales obstáculos a vencer en diversas regiones del país es la inseguridad, y la corrupción, lo cual solo podrá revertirse en la medida en que se logre hacer que ésta última deje de ser una práctica redituable.
Para ello es importante enfrentar el problema a partir de una coordinación y operación efectiva de las autoridades en los distintos niveles y órdenes de gobierno, ya que de lo contrario se debilita el tejido social como la institucionalidad democrática.
González Pérez agregó que en México no solo se requiere pacificar, sino también desarrollar una cultura de paz, para lo cual se debe hacer que haya condiciones para eso, es decir, "los elementos necesarios para que la construcción de la paz sea posible".
Subrayó que los derechos humanos son el piso común con el que deben construirse los cambios que el país demanda, de manera que, cuando se denuncia un abuso de poder, se abre la oportunidad para que, mediante su sanción y prevención, se fortalezcan las instituciones y se haga evidente la democracia.
Indicó que quien defiende los derechos humanos "no es enemigo de la legalidad, ni antagónico del poder" sino que por el contrario, ayuda a fortalecerlo y a propiciar que su ejercicio se haga dentro de los límites que marca la ley.