México, 10 de noviembre 2023--Critican que la Federación levante la declaratoria de desastre y que la Cámara
de Diputados no etiquete recursos para los afectados
El Gobierno federal declaró ayer el fin de la emergencia en Acapulco y la vecina localidad de Coyuca de Benítez, que fueron devastadas por el paso del huracán “Otis”, de categoría 5, pese a que sus pobladores siguen padeciendo graves penurias por las fallas en los servicios y falta de alimentos y agua.
Así lo anunció la Coordinación Nacional de Protección Civil en un acuerdo que se publicó en el Diario Oficial de la Federación, en el que se reconoce que “ya no persisten las condiciones de emergencia”.
La Federación declaró el 26 de octubre la emergencia en Acapulco y Coyuca de Benítez, un día después de que el ciclón azotara las costas del Pacífico, dejando a su paso devastación. En esa oportunidad las autoridades indicaron que con la declaratoria se buscaba acelerar los envíos de ayuda humanitaria y personal para atender a los damnificados.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, el huracán dejó 48 fallecidos, una treintena de desaparecidos, 250 mil damnificados y daños en 80% de la infraestructura hotelera.
El Gobierno anunció la semana pasada un plan de reconstrucción que incluía ayudas a las familias, pequeños empresarios y hoteleros, así como la instalación de 38 cuarteles y el envío a Acapulco de 10 mil elementos de la Guardia Nacional para garantizar la seguridad en la localidad turística de un millón de habitantes, donde se reportaron numerosos casos de saqueos a comercios.
El manejo que ha dado el Gobierno ha desatado fuertes críticas de parte de damnificados, opositores y especialistas.
Los cuestionamientos se intensificaron durante la discusión del presupuesto de 2024, de nueve billones de pesos, que aprobó ayer la mayoría de Morena y aliados en la Cámara de Diputados, en medio del rechazo de opositores que exigieron a las autoridades que se destinen aportes especiales para el puerto.