Integrantes de la fracción blanquiazul presentaron una demanda ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) por los bloqueos y protestas que derivaron en actos vandálicos.
“Es claro que al impedirnos el acceder o salir de nuestros recintos de trabajo en nuestra calidad de legisladores federales, se está cometiendo en nuestro perjuicio por un lado una privación ilegal de nuestras funciones y nuestro libre ejercicio de las mismas y por otra una privación ilegal de la libertad”, externaron.
Los legisladores consideraron que esto podría ser el inicio de un “Estado Fallido” o una crisis de Estado; donde los maestros- a decir de la senadora Mariana Gómez del Campo- se han convertido en delincuentes al lesionar a 28 Policías Federales, agredir y amenazar a reporteros, secuestrar vialidades por más de 9 horas, dañar inmuebles y edificios públicos y automóviles.
“Hay que hacer que la ley se cumpla. El derecho a manifestarse no es un derecho absoluto, hay límites permisibles”, sostuvo.
Por lo anterior, precisó la también Secretaria de la Comisión del Distrito Federal en el Senado, estos pseudo-maestros han incurrido en delitos de sedición, rebelión y motín, así como diversos ilícitos tipificados en el Código Penal Federal.
Reiteró su petición al presidente Enrique Peña Nieto y al Jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera para poner un alto al caos, ya que en sus omisiones han causado daños a terceros e inmuebles, en las que han faltado a su obligación de hacer respetar la ley.
Acompañaron a la legisladora los senadores Adriana Dávila Fernández, Jorge Luis Lavalle Maury y el diputado federal Fernando Rodríguez Doval.