El senador Mario Delgado Carrillo afirmó que una persecución hacia los maestros no logrará una mejora dentro del Magisterio, por lo que urgió a llevar a cabo una Cruzada Nacional en la que se le dé nuevo aliento a los profesores quiénes tenían la ilusión de que la Ley del Servicio Profesional Docente les traería un marco legal para potenciar sus capacidades y no un
desarrollo profesional por acuerdos gremiales y burocráticos.
En otras palabras –dijo el legislador- esperaban un nuevo arreglo institucional para un proyecto de vida digno, merecido, bien remunerado y con alto reconocimiento, pero muy poco de esto tiene la Ley del Servicio Profesional Docente, aprobada el martes pasado.
Sin embargo, “nos quedamos con una ley con mucho garrote y poca zanahoria. Perdimos la oportunidad de convertir a los trabajadores de la educación en profesionales de la educación; prevalecieron los prejuicios y el castigo sobre el reconocimiento y los incentivos”.
Por su parte el coordinador del grupo parlamentario del PRI, Emilio Gamboa Patrón, discrepa de lo señalado por Delgado Carrillo; el primero manifiesta que la Ley será cada vez más aceptada de acuerdo –a decir del priísta- a las bondades que esta posee.
Con esta ley, con la que concluye el proceso legislativo de reforma educativa, ”los priistas en el Senado sabemos que ganan los profesores, porque ya no tendrán que ser directores o supervisores para tener un mayor ingreso, lo único que se requiere es que sean mejores maestros”.
“Son 1.4 millones de maestros de educación básica y media superior los que se verán beneficiados por esta Ley-agregó Gamboa Patrón-, que es un marco jurídico que obliga al Estado a brindar a los docentes todo el apoyo para superarse profesionalmente y elevar su nivel de vida”.
Finalmente afirmó que los ciudadanos reclaman mayor equidad social por lo que aumentando la calidad de quienes egresan de las escuelas de educación básica y media superior, se transformará en oportunidades.