El presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Marco Antonio Baños se lavó las manos antes las acusaciones en contra del PRD por parte del empresario Carlos Ahumada por presuntos actos de corrupción que realizó el partido político a través de los videoescándalos en el 2004.
Durante la presentación del libro, Modelo de una Contraloría General en un Órgano Constitucional alguno, el funcionario público remarco que el asunto de los video escándalos pertenece a los medios de comunicación y por el momento no es competencia del IFE.
“Ahorita no tenemos ningún instrumento presentado ante el Instituto para intervenir absolutamente nada con el PRD respecto de ese tema. Es un tema que se está manejando en los medios donde el IFE no tiene ahorita ninguna actividad que desarrollar”, abundó.
En cambio explicó que dichos actos de corrupción deben ser castigados por tribunales, indicando que si un juzgado le ordenara intervenir en el caso los consejeros electorales lo harían.
“Ahorita no tenemos ningún instrumento presentado ante el Instituto para intervenir absolutamente nada con el PRD respecto de ese tema. Es un tema que se está manejando en los medios donde el IFE no tiene ahorita ninguna actividad que desarrollar”, abundó.
En relación al libro antes mencionado, Baños mencionó que el texto aporta propuestas específicas sobre la regulación de una contraloría en un organismo autónomo, que pueden tomarse como base para la construcción de la legislación secundaria, producto de la Reforma Constitucional en materia electoral.
En presencia del Auditor Superior de la Federación, Juan Manuel Portal Martínez; del Encargado del Despacho de la Secretaría de la Función Pública; Julián Alfonso Olivas Ugalde y del moderador de la mesa, el politólogo Carlos Elizondo Mayer-Serra, Marco Antonio Baños mencionó que en el libro se abordan asuntos específicos que deberían de ser tomados en consideración, a fin de otorgar una vida sólida al Instituto Nacional de Elecciones (INE), en materia de control interno y transparencia.
En la sede del Instituto, el Contralor del IFE y autor de la obra, Gregorio Guerrero, mencionó que el libro busca promover un modelo de contraloría autónoma que pueda ser considerado como una figura transitable y exitosa, el cual permita la consolidación de la fiscalización en dependencias públicas.
El autor dijo que uno de los objetivos de su libro es “lanzar una provocación, que permita intensificar el debate sobre la fiscalización en nuestro país”, y que busca un modelo que suscite la reflexión sobre el rumbo y las alternativas que permitan atender la fiscalización de los recursos públicos.