Petróleos Mexicanos (Pemex) ya prepara evaluar posibles asociaciones con petroleras privadas para desarrollar áreas en el Cinturón Plegado Perdido, en aguas ultraprofundas del Golfo de México, si las autoridades se las asignan en la llamada Ronda Cero.
La paraestatal consignó ante la Secretaría de Energía (Sener) un portafolio diversificado de campos de producción y áreas de exploración que quiere mantener de cara a la apertura de sector de los hidrocarburos, tras la histórica reforma energética promulgada en diciembre.
El llamado Cinturón Plegado Perdido (CPP) es una provincia marina frente al estado de Tamaulipas, en aguas ultraprofundas del Golfo de México donde Pemex ha explorado media docena de pozos y donde ha hallado hidrocarburos.
"Nuestra estrategia es desarrollar la parte de Perdido que hemos solicitado con socios, en consorcio. Sin embargo, no hemos solicitado una parte de Perdido que creemos que lo más prudente es que se desarrolle de forma más acelerada por la industria", dijo el director general de Pemex, Emilio Lozoya, en una entrevista.
"Hemos dejado en Perdido áreas de una gran materialidad porque simplemente al país le conviene monetizar las reservas de forma más acelerada y Pemex solamente puede monetizar una parte de estos proyectos en el corto y mediano plazo", dijo.
El funcionario expresó que la petrolera podría ir tras otros campos u áreas en la ronda uno, que algunos avizoran podría ser lanzada a mediados del 2015.
En tanto, el 17 de septiembre vence el plazo para que la Sener responda a las solicitudes de Pemex, pero se prevé que las autorizaciones se decidirían antes de la fecha límite y de forma progresiva, especialmente las asignaciones de campos en producción.
Como está previsto en la reforma energética, Pemex pidió todas las áreas en producción así como zonas exploratorias en donde ha hecho descubrimientos comerciales, incluyendo aguas profundas y cuencas del sureste.
En tanto, liberó áreas del controvertido proyecto Chicontepec a particulares para que puedan participar en rondas posteriores, además de solicitar una fracción de los recursos prospectivos de shale (lutitas).
La gigante estatal pidió en total el 83 por ciento de las reservas 2P (probables y posibles), así como el 31 por ciento de los recursos prospectivos.
"Pemex está dejando esta cantidad muy importante de reservas 2P y de recursos prospectivos en el mercado porque creemos que la forma más transparente y la forma más eficiente de desarrollar estos proyectos es compitiendo por ellos en asociación, con los socios adecuados para cada tipo de yacimiento", dijo Lozoya.
El Gobierno mexicano espera que la reforma energética, que aún aguarda por una compleja reglamentación secundaria, potencie la estancada producción de hidrocarburos y con ello se impulse la expansión de la segunda mayor economía de América Latina.
Lozoya ha dicho que México requiere de unos 60,000 millones de dólares anuales para llevar su producción de crudo mucho más arriba de la actual de 2.5 millones de barriles por día en promedio.
El director general de Pemex dijo que hacia el futuro la empresa trabajará con socios en campos maduros, de shale y en aguas profundas y posiblemente en aguas someras de crudos extrapesados; mientras que podría hacerlo en solitario en los yacimientos de aguas someras, de crudos ligeros.
Buscan Pemex evitar el riesgo ecológico
"Pedimos todas las áreas donde hemos reducido el riesgo geológico (en Perdido) donde están los pozos donde hemos tenido éxito", dijo en una entrevista telefónica Fluvio Ruíz, consejero profesional de Pemex y miembro del consejo de administración de la empresa.
La estatal ha explorado hasta ahora seis pozos en Perdido: Trión-1, Supremus-1, Maximino, Vespa, Pep-1 y Exploratus-1. Todos menos Pep han reportado presencia de hidrocarburos, según han revelado ejecutivos de alto rango de la empresa.
El llamado Cinturón Plegado Perdido (CPP) es una provincia marina frente al estado de Tamaulipas, en aguas ultraprofundas del Golfo de México.
"Pedimos allí esas áreas, el criterio general es que donde hemos reducido riesgo geológico, donde ya hemos ido delimitando, todo eso lo hemos solicitado", dijo Ruíz quien precisó que cada área que pide Pemex comprende casi mil kilómetros cuadrados.
El consejero dijo que también se solicitó le sea asignado a Pemex en la Ronda Cero el proyecto de gas Lakach, que está en aguas del Golfo de México frente al estado de Veracruz.
Poco más tarde, el regulador del sector, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) informó que Pemex solicitó en extracción, todos los campos en producción y en exploración propuso operar las áreas en donde cuenta con descubrimientos comerciales, incluyendo las aguas profundas del Golfo de México.
La petrolera también solicitó las principales áreas de exploración que coincidan con campos en producción, y en donde se cuenta con inversiones en proyectos de exploración, en la Cuencas del Sureste.
Y en el caso de Chicontepec -un proyecto geológicamente muy complejo donde se estima está el 40 por ciento de las reservas petroleras mexicanas- y recursos no convencionales, Pemex liberó en Ronda Cero importantes áreas para la participación de privados en futuras licitaciones.
"Pemex solicita el 83% de las Reservas 2P (probables y posibles) y el 31 por ciento de los recursos prospectivos", dijo la CNH en su página de internet.
El Gobierno apuesta a que con la reforma energética México podrá captar miles de millones de dólares en inversiones para elevar la estancada producción petrolera, de unos 2.5 millones de barriles por día (bpd) en promedio, y la de gas, para impulsar así el crecimiento económico a tasas robustas.