Hasta que no se apliquen las reformas estructurales y secundarias en México, el desarrollo económico en México estará estancado, y tenderá a no acelerar su recuperación, dio a conocer la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) quién recortó su estimación para México de 3.5% a 3%, mientras que para la región las redujo de 3.2% a menos de 3 %.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe hizo dicho pronóstico, producto de la volatilidad, así como de los ajustes en las políticas monetarias y fiscales.
La Secretaria Ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, dijo que solo se mantendrán los altos ritmos en la actividad productiva de Perú, Colombia y Panamá, éste último por las inversiones que realiza en infraestructura.
Además recomendó que México y los países de América Latina deben replantear su modelo económico basado en exportaciones y, aunque cada país tendrá que definir cuál será, es importante que incluyan el componente de inversión, en infraestructura, educación, salud y todo aquello que genere beneficios a mediano y largo plazos.
Bárcena se refirió a las actuales reformas que se discuten en el Congreso y afirmó que la fiscal va en el camino correcto, pero la energética “hay que mirarla con cuidado”, porque hace definir mecanismos para que una parte de la renta petrolera se reinvierta en infraestructura en el país y no en gasto corriente. Hay que tomar en cuenta que son las empresas estatales las que tienen la capacidad redistributiva y no las privadas, aunque las dos pueden ganar.
INGRESOS TRIBUTARIOS DEL PETRÓLEO
Asimismo refirió que en el futuro habrá que tratar de desvincular los ingresos tributarios del petróleo; sobre todo hay que cambiar de modelo económico, porque actualmente México enfrenta una baja productividad y los trabajos son precarios e informales, explicó la Secretaria Ejecutiva.
“Las reformas tienen que verse con base al modelo de desarrollo al que le apuesta México. Creo que debería apostarle a un modelo en el que la igualdad esté en el centro, el camino sea el cambio estructural y el instrumento central sea la política del más alto nivel. Cada país debe escoger su modelo. Pero en México hace falta un cambio profundo para cerrar brechas estructurales muy contundentes”, dijo.
La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, planteó una estrategia para lograr un desarrollo con igualdad en el Caribe que permita además reducir los riesgos derivados de desequilibrios económicos o de fenómenos naturales y aumentar su resiliencia ante esos choques.
Según la alta funcionaria de Naciones Unidas, la región sufre brechas estructurales que se reflejan en restricciones de financiamiento, una desigualdad creciente y una insuficiente protección social, un capital humano limitado y una baja productividad e inversión. Además, el desempleo permanece en niveles altos y la deuda externa es superior en promedio a 60 % de su Producto Interior Bruto -en casos como Jamaica, Granada y Saint Kitts y Nevis está por sobre 100 %-.
En este contexto, el Caribe enfrenta dos importantes desafíos: estimular el crecimiento y mitigar los riesgos y las incertidumbres derivadas de la destrucción asociada a distintos fenómenos naturales, cuyos efectos se ven exacerbados por el cambio climático; y de las consecuencias que esas catástrofes tienen sobre el turismo, sector clave en esta región, lo que contribuye a una mayor volatilidad en sus ingresos.
RIESGOS
Los riesgos también están asociados a la creciente apertura de sus economías, que las exponen en mayor medida a las turbulencias externas, y a su reducido espacio fiscal, que limita su capacidad para realizar ajustes económicos, explicó la Secretaria Ejecutiva.
Además, la mayoría de estos países están considerados de renta media de acuerdo a su ingreso per cápita, que constituye el principal criterio utilizado para asignar los recursos financieros de la asistencia oficial para el desarrollo. Esto se ha traducido en una progresiva reducción de estos flujos hacia el Caribe.
Por ello, la CEPAL propone a los países de esa región impulsar una política industrial acompañada de reformas fiscales y laborales para promover la igualdad y el desarrollo, incentivar las alianzas entre el sector público y el privado y establecer también lazos con otros actores del comercio internacional para diversificar mercados y reducir el impacto de los choques externos.
Además, la Comisión plantea que los servicios se reorienten para atender las necesidades no solo del mercado doméstico sino también de un mercado global más amplio, que se fortalezcan las economías de escala a través de la colaboración con otros pequeños estados insulares en desarrollo y que se mejore la coordinación entre las instituciones públicas a nivel nacional y regional para evitar la duplicidad de esfuerzos.
En este encuentro participaron también la Directora de la Subsede Regional de la CEPAL para el Caribe, Diane Quarless, así como el Ministro de Finanzas y Planificación de Jamaica, Peter D. Phillips, y los Ministros de Exteriores de Jamaica, Arnold J. Nicholson; de Guyana, Carolyn Rodrigues-Birkett, y de San Vicente y las Granadinas, Camillo Gonsalves.