El Instituto Nacional Electoral, está “listo” para que en caso de que así se determine no nada más organice, sino también, haga un recuento de votos sobre la consulta popular vinculada a la reforma energética y al salario mínimo, afirmó el director Ejecutivo de Organización Electoral, Miguel Ángel Solís Rivas.
“La institución está lista, nuestras experiencias de recuento de votos son suficientes para atender con absoluta solvencia el recuento de votos de la elección de diputados federales y a continuación el recuento de votos, si es necesario, de la consulta popular”, remarcó el funcionario.
Durante la tercera parte del “Primer Ciclo de Talleres para Periodistas, sobre la Reforma Política Electoral: Nuevas atribuciones del Órgano Electoral Nacional, con el tema “Organización y Capacitación Electoral”, Solís Rivas, no obstante dijo que como la reforma energética, recién promulgada y la propuesta de aumento al salario mínimo están “en veremos”, la consulta popular estaría integrada a la casilla única para los comicios federales del próximo año.
Destacó que el recuento de votos en la consulta popular “está en veremos”, aceptando que no sabe “ si existe alguna probabilidad o no” de que el ejercicio propuesto por la izquierda nacional se pueda incluir en el modelo de “casilla única” que se estrenará el domingo 7 de junio.
“La ley dice, tanto la de procedimientos electorales de nuestra competencia directa, como la Ley Federal de Consulta Popular dicen que se atenderá por los funcionarios de las elecciones federales la consulta y que estará sujeta a escrutinio y cómputo en los órganos distritales y que podrá haber recuento de votos”, apreció.
Por otra parte el director Ejecutivo de Capacitación Electoral del Instituto, Luis Javier Vaquero Ochoa, explicó que para el proceso comicial del 2015 el INE habrá de seguir sus protocolos de seguridad, donde se contempla suscribir convenios de colaboración con las corporaciones policíacas en sus tres niveles y las fuerzas armadas.
Recordó que en los comicios del 2012 se siguieron estos protocolos de seguridad y, al tener “mapas de riesgos”, se pondrá especial atención para que los ciudadanos y el material electoral estén bajo buen resguardo.
En tanto dejó claro que será responsabilidad de los presidentes de casilla y demás funcionarios electorales, determinar si solicitan o no la presencia de elementos armados ante un posible riesgo de que se altere el orden.