El gobierno federal apoyará la nueva terminal aérea en la ciudad de México a través de financiamientos directos de la banca de desarrollo principalmente de Nacional Financiera (Nafin), y el Banco Nacional de Exterior (Bancomext) con un costo de por lo menos 140 mil millones de pesos, de los cuales 85% serían aportados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el resto por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
De acuerdo con los prototipos presentados al gobierno federal por diversas firmas internacionales reconocidas en esta obra de infraestructura, no se contempla afectar los linderos ejidales del municipio de San Salvador Atenco.
Sin embargo, todo parece indicar que se avecina un conflicto como el de 2006 en San Salvador Atenco, ante el desconocimientos de sus habitantes del nuevo trazo aeroportuario. Las firmas de arquitectos garantizan al gobierno federal una obra con equilibrio lacustre y ecológico del antiguo lago de Texcoco; es decir, el aeropuerto será construido encima de pequeñas lagunas que existen en la zona.
De acuerdo con los especialistas Henry Mendegard y Néstor Palacios, inmediatamente después del anuncio se hizo presente la protesta de los dirigentes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra en esa localidad.
Y, aunque el nuevo aeropuerto de la ciudad de México está cuidadosamente planeado fuera de los territorios de Atenco y otros pueblos afines a los grupos radicales, se esperan los enfrentamientos porque ya están aprovechando los grupos antigubernamentales para tratar de impedir esta obra muy necesaria, indicaron los especialistas.
Sin embargo, la planeación de esta gigantesca obra es .un proceso cuidadoso y está listo, es jurídicamente impecable y no cabe duda de que es de evidente urgencia su construcción.
América del Valle, -la recuerdan?- integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, ya se pronunció y el mismo martes dijo que se trata de la misma superficie que expropió Vicente Fox, advirtió, y señaló que los poblados que están en resistencia son San Salvador Atenco, Acuexcomac, Tocuilac y San Felipe.
Mendegard, Dijo que la construcción de la citad obra no será fácil, porque los antecedentes apuntan a que estos grupos, los radicales, encontrarán en la edificación del nuevo aeropuerto una oportunidad para la resucitación política.
Luego que el presidente dio a conocer el proyecto para la construcción de la nueva terminal aérea metropolitana, que reemplazará al actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), las disputas entre los ejidatarios que lo aprueban y quienes lo rechazan se recrudecen. Al mismo tiempo, avanzan las modificaciones legales que permiten la venta de terrenos donde presuntamente se edificará la terminal aeroportuaria con hoteles y centros comerciales. Atenco, en el Estado de México, está conformado por varias comunidades, pero el gobierno federal solo requiere de cinco para construir este proyecto: Santa Isabel Ixtapan, San Francisco Acuexcomac, San Cristóbal Nexquipayac, Francisco I. Madero y San Salvador Atenco; esta última (cabecera municipal) es la más grande y es conocida por los enfrentamientos de 2006 con la Policía Federal, lo que dejó un muerto, decenas de heridos y varios líderes del Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) detenidos y encarcelados en el penal de Almoloya de Juárez. Ambos especialistas señalaron que no será fácil para el gobierno federal la construcción de esta obra aeroportuaria, pero se tendrá que hacer porque ya se compraron tierras en esa entidad y todo esta legal. Es urgente y necesario porque hay un problema de saturación aérea en el centro del México, que restringe significativamente la conectividad nacional e internacional del país, afecta al turismo y la generación de nuevas inversiones y de empleos en la región. Además de los usuarios que se han visto afectados por las demoras ocurridas en algunos de sus vuelos y de las aerolíneas que se encuentran limitadas para planear a largo plazo nuevas rutas, las constructoras mexicanas celebrarán la decisión de crear nuevas instalaciones y ya han levantado la mano. En los últimos seis meses, algunas firmas afiliadas a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) unen ya esfuerzos para formar un consorcio sólido que haga frente a los tiradores internacionales. "Es un esfuerzo inédito para un proyecto de grandes dimensiones. Tenemos claro que entre todas logran, sin problema, la fortaleza financiera para cumplir con los requerimientos que se soliciten", comentó recientemente el presidente de CMIC Luis Zárate. Algunas de las empresas que participarían en el consorcio son: ICA, Grupo Carso y Grupo Hermes. Los detalles se ofrecerán en los siguientes días. El Plan Maestro de Desarrollo de la nueva terminal contempla la construcción de hasta seis pistas y dos edificios para terminales. En una primera etapa se estima que se construyan sólo tres nuevas pistas y un edificio terminal que permitirían multiplicar el volumen de pasajeros. La nueva terminal, que se anunciará este miércoles, estará ubicada al poniente del actual AICM, en el Lago de Texcoco, en una superficie de alrededor de 12 mil 500 hectáreas y su costo será, en su mayoría, autofinanciable con los ingresos de la actual terminal aérea, informó Gerardo Ruiz Esparza, titular de la SCT. Actualmente el AICM concentra 34 por ciento de todos los pasajeros que se mueven por el país y 23 por ciento de todas las operaciones a escala nacional, según el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018. El Plan Maestro de Desarrollo de la nueva terminal contempla la construcción de hasta seis pistas y dos edificios para terminales. En una primera etapa se estima que se construyan sólo tres nuevas pistas y un edificio terminal que permitirían multiplicar el volumen de pasajeros. La nueva terminal, estará ubicada al poniente del actual AICM, en el Lago de Texcoco, en una superficie de aproximadamente de 12 mil 500 hectáreas y su costo será, en su mayoría, autofinanciable con los ingresos de la actual terminal aérea, informó Gerardo Ruiz Esparza, titular de la SCT. Actualmente el AICM concentra 34 por ciento de todos los pasajeros que se mueven por el país y 23 por ciento de todas las operaciones a escala nacional, según el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018. Manuel Ángel Núñez Soto, el ex Gobernador de Hidalgo, fue nombrado director general de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México S.A. de C.V. (GACM), la empresa que se encargará de construir la nueva terminal aérea. y recibirá un sueldo neto de 137 mil 243.75 pesos. Esto, según los acuerdos tomados en la Primera Sesión Ordinaria del Consejo de Administración de dicho Grupo que se celebró el pasado 4 de julio en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. En la parte financiera estará Federico Patiño Márquez, como director Corporativo de Financiamiento. Estuvo en Bancomext y Banobras. Raúl González Apaolaza es el director corporativo de Infraestructura y también nació en Hidalgo. Ha ocupado puestos en el Metro y en instituciones de educación pública. Como subdirector de Control de Obras se propuso a Jorge Alberto Albarrán Ascencio, cuya experiencia laboral la ejerció en empresas como Carso y Grupo ICA, entre otras. Las nuevas instalaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) tendrán un costo de por lo menos 140,000 millones de pesos, de los cuales 85% serían aportados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el resto por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Los trabajos incluirán la construcción de un par de vasos reguladores. "Debido a las complejidades que tendrá la construcción en la zona del Lago de Texcoco, la parte que corresponde a las obras de regeneración o rescate hidráulico requerirán también de una fuerte inversión. A la fecha ya comenzaron algunos trabajos en ese sentido. |