La economía mexicana enfrenta el riesgo de que se prolongue el estancamiento del mercado interno, se retrasen inversiones, aumente el déficit y deuda pública, siga la volatilidad en tasas de interés, tipo de cambio, la inseguridad, los problemas de
gobernabilidad democrática y de Estado de derecho, esto lo advirtió la cúpula empresarial a través del presidente del Consejo Coordinador Empresarial , Gerardo Gutiérrez Candiani.
Dijo que la volatilidad, especulación e incertidumbre que afecta al tipo de cambio muy probablemente se mantendrá hasta la primera mitad del 2015.
Y bueno propuso "hacer una reingeniería presupuestal en los tres niveles de gobierno, una tala de costos evitables, como los que derivan de corrupción, ineficiencias, programas sin beneficio real o demostrable, que pueden redirigirse o mejorarse, así como gastos superfluos, incompatibles como país", aseveró.
Es importante reducir la posibilidad de que se presenten los peligros anteriores y, abocarse a apuntalar las oportunidades y ventajas del país, lo que incluye implementar las reformas estructurales, precisó.
Por lo que es importante apuntalar el Estado de derecho y se aprueban las leyes anticorrupción con lo que podría construirse mayor certeza y confianza tanto para la sociedad como para los inversionistas.
Explicó que el comportamiento del entorno macroeconómico y la caída en los precios del petróleo, podrían significar un ajuste en los ingresos públicos, expuso la publicación semanal del organismo.
“Ante este panorama, es claro que se impone la exigencia de un monitoreo puntual del desarrollo de los acontecimientos, a fin de evitar riesgos a la estabilidad macroeconómica”, subrayó Gutiérrez Candiani.
Opinó que los mayores retos se perfilan hacia 2016, ante lo que es necesaria la prudencia en el manejo de las finanzas públicas.
“No se pueden esperar resultados significativamente distintos en un corto o mediano plazo sin ajustes o cambios en políticas públicas y empresariales”, sostuvo el presidente del CCE.
Resaltó que aún cuando hay visos alentadores en variables como el consumo y el crédito, estas variables son aún incipientes.
Las ventas a tiendas comparables de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) crecieron 5.1 por ciento anual en febrero, el mejor desempeño para ese mes desde 2012, indicó.
En tanto, añadió, la confianza del consumidor aumentó ligeramente, y en dos años, el financiamiento para las micro, pequeñas y medianas empresas subió 9.0 por ciento.
A su vez, señaló, conforme avanza el año, y más aún en 2016, se aceleran proyectos de inversión importantes, como la Ronda 1 derivada de la reforma energética, el nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y las cadenas de televisión abierta que se han licitado, entre otros.
Además, habrá buenas condiciones para la exportación y la manufactura, con la economía estadounidense al alza e inclusive un tipo de cambio competitivo.
“Lo que corresponde es dar más empuje a las incipientes señales de mejoría y a las oportunidades en el escenario, con medidas de efecto rápido, como pueden ser esquemas fiscales para que haya mayor liquidez en las familias y las empresas”, planteó.
En ese sentido, Gutiérrez Candiani propuso aprovechar los espacios que se han creado entre el sector público y el privado.
Entre éstos, el Consejo Consultivo Empresarial para el Crecimiento, Comité Nacional de Productividad, Comisión Intersecretarial para la Prevención y Combate a la Economía Ilegal, Grupos consultivos para el apoyo a las negociaciones internacionales, Mesa de Gasto Público con SHCP, Convenio CONAGO-CCE entre otras.
“En la medida en que reforcemos esta coordinación para una actuación eficaz en el corto plazo, sin perder nunca de vista la construcción estructural para lograr un crecimiento sostenible de al menos 5.0 por ciento anual, como lo necesitamos, y podemos, estaremos cumpliendo con el gran desafío de romper con la inercia económica”, aseguró.