Para México, el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) abre nuevas oportunidades de negocio para el sector productivo nacional en seis mercados de Asia-Pacífico, considerada la región que registrará el mayor crecimiento económico en los próximos 25 años.
Así lo afirmó el titular de la Secretaría de Economía (SE), Ildefonso Guajardo Villarreal, quien sostuvo que el desenlace de la negociación fue posible gracias a la voluntad política, pragmatismo y flexibilidad de cada una de las partes involucradas.
Tras el anuncio de la conclusión de las negociaciones de este acuerdo comercial, el funcionario aseguró que México y las 11 contrapartes del TPP “hicieron historia al concluir un acuerdo con un nivel de ambición, amplitud y estándares nunca antes alcanzados”.
“El TPP será, sin duda, un modelo de negociación para futuros acuerdos comerciales y pone a México a la vanguardia en la materia”, subrayó.
Reiteró que para México, el Acuerdo es de suma relevancia porque permite al el sector productivo del país abrir sus posibilidades en seis mercados de Asia-Pacífico (Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelandia, Singapur y Vietnam).
“México logró los balances adecuados entre los intereses ofensivos y las sensibilidades en áreas como la cadena autopartes-automotriz, textil-vestido y productos agropecuarios como, arroz, productos cárnicos, y el sector lácteo”, resaltó.
De acuerdo con la SE, los 11 países que también forman parte del TPP representan casi tres cuartas partes (72 por ciento) del comercio exterior de México, y son el origen de más de la mitad (55 por ciento) de la inversión recibida por el país desde 1999.
El Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) representa el cumplimiento de la promesa del presidente Barack Obama de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá, señaló hoy la Casa Blanca.
“En 2008, el presidente hizo la promesa de renegociar el TLCAN y elevar los estándares, y encarar las preocupaciones que han sido expresadas por muchos sobre el verdadero impacto del acuerdo comercial”, recordó el portavoz presidencial Josh Earnest.
“Demoró siete años pero el presidente cumplió su promesa. Y el texto del acuerdo que será divulgado más tarde este año, eleva los estándares laborales… ambientales y se asegura que sean cumplibles”, remató.
Earnest señaló en ese sentido que el TPP incluye protecciones que permiten a los trabajadores formar sindicatos, así como protecciones relacionadas con condiciones laborales, la prohibición del trabajo infantil y busca aumentar el salario mínimo.
“Esto significa cumplir con la promesa de campaña del presidente de renegociar y elevar los estándares del TLCAN porque México y Canadá son parte de este acuerdo (TPP)”, insistió el vocero presidencial.
En junio pasado, en medio de las negociaciones del TPP, la Casa Blanca había señalado que uno de los objetivos de Estados Unidos era encarar exitosamente muchas de las preocupaciones que los demócratas hicieron sobre el impacto del TLCAN sobre la economía estadunidense.
Durante el debate legislativo del TLCAN en 1993, el entonces presidente Bill Clinton forjó una alianza con los republicanos para superar la oposición de su propio Partido Demócrata.
El acuerdo fue aprobado en septiembre de ese año y entró en vigor el primero de enero de 1994.
Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malaysia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, Estados Unidos y Vietnam anunciaron esta mañana en Atlanta el histórico acuerdo del TPP.
El presidente Barack Obama aplaudió las conclusiones del acuerdo y destacó que incluye los compromisos laborales y ambientales más fuertes que cualquier otro acuerdo, promueve un Internet abierto y refuerza las “relaciones estratégicas” con sus socios y aliados en la región.
“Si podemos hacer que el acuerdo llegue a mi escritorio, podemos ayudar a nuestros negocios a vender más bienes y servicios ‘Hechos en Estados Unidos’”, señaló Obama.
Los negociadores resolvieron el fin de semana los últimos escollos pendientes, incluidos los diferendos sobre las protecciones a la industria farmacéutica, productos lácteos, endulzantes y acceso de mercado en agricultura y automóviles.
La TPP, negociada a lo largo de más de cinco años y que representa el 40 por ciento del comercio global, desfasará los aranceles en todos los productos comerciados en la zona, con la excepción de carne de res en el caso de Japón y de algunos productos lácteos, tema sensitivo para Nueva Zelanda.
IP complacida
En tanto, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) estimó que la conclusión exitosa del Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) implica la creación del tratado multilateral de libre comercio más ambicioso que México ha negociado a la fecha.
Adicionalmente, el convenio prevé mayor profundidad en las disciplinas comerciales tradicionalmente incluidas en este tipo de instrumentos, puntualizó la cúpula empresarial en un comunicado.
Por ejemplo, el acceso a mercado de bienes y servicios, inversión, propiedad intelectual, obstáculos técnicos al comercio, reglas de origen, compras de gobierno, comercio transfronterizo de servicios, solución de controversias, entre otros.
Además, indicó, contiene disposiciones de nueva generación, en temas como empresas del Estado, ambiental, laboral, comercio electrónico, anticorrupción; pequeñas y medianas empresas, competitividad, coherencia regulatoria y desarrollo, que no habían sido consideradas en acuerdos anteriores.
El CCE destacó que de los 12 países que integran el TPP, México cuenta actualmente con acuerdos suscritos con cinco países: Canadá, Chile, Estados Unidos, Japón y Perú.
Cuando entre en vigor este convenio, México contará con acceso a seis nuevos mercados en Asia y Oceanía con países como Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam, apuntó.
Agregó que el TPP permitiría que los exportadores mexicanos aprovechen su actual inserción en las cadenas de valor de Estados Unidos para enviar insumos que los productores estadounidenses utilizarían en la manufactura de bienes finales para ser exportados a los países de la región del Pacífico.
Con ello, obtuvo acceso preferencial en el sector agropecuario a los países con los que no había suscrito acuerdos de libre comercio.
Asimismo, amplió sustancialmente el acceso agropecuario al mercado japonés que resultó de la entrada en vigor del Acuerdo para el Fortalecimiento de la Asociación Económica entre México y Japón en 2005, de acuerdo con la cúpula empresarial.
“México veló igualmente por el establecimiento de reglas claras de certificación y verificación de origen para evitar abusos o usos indebidos en las declaraciones para determinar el origen de los bienes comerciados en el marco del TPP”, recalcó.
Asimismo, sostuvo que México logró incluir disposiciones en el acuerdo que indican que el TPP coexistirá con documentos anteriores, incluyendo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). De esta forma, se protegieron los derechos que México tiene en el mercado estadounidense en virtud del referido acuerdo trilateral.
El CCE sostuvo que se establecieron reglas para la adhesión de nuevos miembros que reconocen a los miembros fundadores, como México, el derecho de negociar las condiciones de acceso ante nuevos países interesados en formar parte del TPP.
Por su parte, la Cámara Internacional de Comercio (ICC, por sus siglas en inglés) aseguró que el Acuerdo de la Asociación Transpacífico (TPP) estimulará el flujo de comercio internacional y facilitará a pequeñas empresas el acceso a mercados del bloque.
La organización se congratuló “por la exitosa” conclusión del Acuerdo que involucra a 12 naciones, porque representa un gran avance para el comercio global.
En un comunicado, el secretario general de la ICC, John Danilovich, expuso que los beneficios económicos y estratégicos del TPP “no deben subestimarse”.
Dijo que con la reducción de los flujos globales de comercio del primer semestre del año, el TPP tiene el potencial de proporcionar “el muy necesitado estímulo a la economía global” con beneficios que se extienden más allá de los 12 estados firmantes.
En su opinión, las pequeñas empresas, en particular, se verán ampliamente beneficiadas por la simplificación del acceso a mercados del bloque comercial, que abarca casi 40 por ciento de la producción económica global.
“Como el acuerdo comercial más grande en más de dos décadas, el TPP representa un gran avance para el sistema global de comercio. En particular, esperamos que el liderazgo político mostrado por los socios del TPP impulse la conclusión de la estancada Ronda de Doha”, sostuvo Danilivich
Según dijo, la ICC está lista para trabajar con su red global para asegurar que el TPP se implemente a la brevedad y garantizar que las mejores prácticas de este vanguardista acuerdo puedan replicarse a nivel global.