La propuesta de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre ejercer un esquema de prorrateo en el sistema de pensiones sólo beneficiará a las finanzas públicas, pero no resolverá de fondo el problema en el
sistema, indicó Leopoldo Somohano, director corporativo de Planeación Estratégica de Afore Principal.
“La alternativa servirá para que las finanzas públicas del país tengan menos presión en el pago de pensiones, pero no ayuda en nada al sistema de pensiones, dado que no se está eliminando de fondo el problema, que son los esquemas de beneficio definido que absorben recursos del erario público, como el caso de los trabajadores de Pemex, CFE y universidades”, indicó.
En entrevista, explicó que el número de trabajadores que están ingresando al mercado laboral con respecto a los que se están retirando está ocasionando que el gasto que destina el gobierno para el pago de las pensiones se incremente en una mayor proporción del Producto Interno Bruto (PIB).
“Si tenemos que el gasto público promedio en pensiones en el último año de gobierno del ex presidente Ernesto Zedillo era de 69,000 millones de pesos; para el 2014 el gasto ascendió 525,000 millones de pesos, monto que significó 11.6% del PIB. Si seguimos con la misma tendencia, en el futuro el gasto público sólo servirá para el pago de pensiones”, detalló.
De acuerdo con el estudio “Sistema dePensiones en México” de la OCDE, el problema radica en que cuando se hizo la reforma en el sistema en 1997, el gobierno prometió a los trabajadores que estaban registrados bajo el régimen de la Ley de 1973 que podían elegir en qué esquema querían pensionarse, si con en el viejo o con el de las administradoras de fondos para el retiro (afores).
Entonces, al ver que la mayoría de los trabajadores elegiría el esquema viejo, dado que se les otorgaría una pensión de más de 50% de su último salario, mientras que el de la afore sería menor, la OCDE propuso un esquema de prorrateo, pues el costo para financiar esas pensiones significaría comprometer más a las finanzas públicas del país.
Al respecto, Samohano comentó que mientras que el gasto público crece a tasas promedio de 2.9%, el gasto en pensiones lo hace en 14.4%, por lo que existe un gran déficit entre lo que crece el gasto público y los recursos que se destinan a pensiones.
Cuentas en ley de 73
El directivo comentó que de los 3 millones 589,122 cuentas de trabajadores que tiene Principal, alrededor de 50% están registradas bajo el régimen de la ley de 1973. “Los recursos de las personas que ya están jubiladas no se verían afectados, pero de los que aún no lo están si habrá un impacto”, destacó.
“Si se acepta la propuesta de la OCDE, una afectación clara será la pensión que se le entregue al trabajador de transición, porque se plantea que el monto de la pensión esté dividido en dos partes; por un lado se le cotizará con el esquema viejo y la otra con base en la ley nueva que es en afores”, aseveró.
En su momento la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro informó que del total de cuentas que administran las 11 afores, alrededor de 50% pertenece al régimen de la Ley de 1973, que podrían representar alrededor de 26 millones de trabajadores.