Recomiendan a Banxico subir tasa de interés

banxico

La cotización del tipo de cambio que superó el jueves la barrera de los 19 pesos por dólar, está generando serias preocupaciones en diversos círculos empresariales y financieros.

Para muchos, a ese nivel, las ventajas competitivas que el país ha ganado al tener una

moneda más débil que abarata sus exportaciones y servicios turísticos, comienzan a evaporarse de forma rápida por los peligros que esa cotización representa para la inflación y en consecuencia para la estabilidad macroeconómica del país.

Ante esto, diversas voces comienzan ya a sugerir a Banco de México que suba su tasa de interés de referencia, incluso antes de su próxima reunión de política monetaria programada para mediados del mes que entra, a fin de fortalecer al peso.

"Si el tipo de cambio sigue muy presionado, [un aumento a las tasas]. . . pudiera suceder fuera del calendario normal de reuniones de Banco de México", dijo Alexis Milo, economista en jefe para México con Deutsche Bank, en una entrevista telefónica.

Dentro de las atribuciones que tiene el banco central está el de mover su tasa de referencia cuando lo considere conveniente. Por lo general, esa decisión la toma la junta de gobierno del instituto central en sus reuniones de política monetaria que tienen lugar casi cada mes y que son previamente programadas.

Pero luego que la moneda mexicana superó en días reciente dos barreras que se pensaban infranqueables a inicio de este año --la de los 18 y 19 pesos por dólar--, algunos especialistas comienzan a pensar que las autoridades monetarias no deben esperar un mes más para anunciar un alza de tasas.

"Una intervención del banco central es cuestión de días", dijo Rodolfo Navarrete, economista de Vector Cada de Bolsa, a la agencia de noticias Bloomberg, el jueves pasado.

Claro que no todos coinciden con esa apreciación. El impacto negativo que podría tener tal decisión en el desempeño económico de México, hace que algunos piensen que las autoridades monetarias esperaran para tomar su decisión de elevar o no las tasas en marzo.

"Sin duda hay debilidad en la economía, con lo que dificulta implementar un ciclo restrictivo agresivo", escribió Marco Oviedo, economista en jefe para México del banco británico, Barclays, en respuesta a un correo electrónico.

Incluso, la mayoría de los economistas que encuestó Banco Nacional de México, o Banamex, a finales de enero, aplazaron su expectativa del aumento a la tasa de referencia en México de mayo a junio.

Muchos de estos especialistas, que fueron entrevistados antes de la caída reciente del peso y que lo ubica ya en un nivel 9% más débil contra el dólar este año, no ven aún motivos por los cuales el banco central mexicano deba subir su tasa.

Para ellos, la debilidad de la economía mexicana y el poco impacto que hasta ahora ha tenido la depreciación del peso en la evolución de los precios, debería permitir a Banco de México tomarse el tiempo necesario para decidir si conviene o no subir su tasa de referencia.

"Creemos que [la debilidad] del tipo de cambio está ocurriendo por una serie de eventos a nivel internacional, no es el único activo que se está movimiento; [los mercados] emergentes han caído, los precios del petróleo han caído fuertemente, y en ese sentido el peso es la moneda que le permite a México ajustarse ante ese nuevo entorno externo", dijo Carlos Capistrán, economista en jefe para México con Bank of America Merrill Lynch, en una entrevista telefónica.

Capistrán no ve un aumento de tasas en México ni siquiera en los próximos días o semanas. Para él, Banco de México podría subir su tasa hasta junio cuando la Reserva Federal estadounidense pudiese también elevar las suya, algo que, sin embargo, ante la debilidad de la economía mundial y la fortaleza del dólar --dos fenómenos que están desacelerando a la mayor economía del planeta-- parece cada vez menos probable.

El gran problema que enfrentan las autoridades monetarias ante la debilidad del peso y sus posibles repercusiones en las expectativas inflacionarias en el país, está en que un aumento a las tasas de interés podría frenar el repunte económico que ha tenido el consumo doméstico y que permitió al país crecer 2.5% el año pasado, su mejor desempeño desde 2012.

Por lo general, tasas de interés más altas inhiben el consumo y la inversión, al tiempo que fomentan el ahorro.

Si el banco central de México subiera la tasa de referencia, podría, por un lado, hacer más atractivos los instrumentos financieros denominados en pesos, lo que podría frenar la caída de la moneda mexicana frente al dólar, pero, por otro, podría también frenar el motor que permitió a México crecer el año pasado: el consumo y la inversión domésticos.

Follow Us on Social

Most Read