Por primera vez en 18 años, la banca comercial prestó más dinero para comprar casas y departamentos que el Infonavit y Fovissste de forma conjunta, instituciones creadas para tal fin por el gobierno.
En los primeros 2 meses de 2016, la banca otorgó créditos por 20 mil 400 millones de pesos para la compra de vivienda, mientras que los organismos de este sector del gobierno federal, Infonavit y Fovissste, asignaron 19 mil 600 millones de pesos, esto es 800 millones de pesos menos que los bancos, de acuerdo con el último Reporte Mensual del Sector de la Vivienda, publicado por la Comisión Nacional de Vivienda.
Son varios motivos los que explican este comportamiento, el primero es la contracción del programa de subsidios por el recorte al gasto público, dadas las condiciones a la baja del petróleo; el segundo es que muchas de las personas que adquieren créditos con estas instituciones son empleados públicos, entonces por la reducción de gasto del gobierno, prefieren esperarse hasta considerar una estabilidad en sus puestos de trabajo.
Desde 1995, luego de la crisis del “Error de Diciembre”, la banca quebró y el Infonavit despuntó hasta nuestros días como institución de crédito para adquisición de vivienda, explicó el experto.
En 2010, el Infonavit y el Fovissste prestaron 14 mil 400 millones de pesos en crédito, monto 58.8 por ciento superior al que otorgó la banca, de 9 mil 100 millones de pesos.
El año pasado, la brecha todavía fue de 17 por ciento, pues las instituciones gubernamentales prestaron 21 mil 300 millones de pesos, mientras que la banca dio crédito por 18 mil 200 millones.
De acuerdo a datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, de enero a febrero de 2016, la tasa de interés promedio de los bancos comerciales para la adquisición de vivienda nueva y usada fue de 10.02 por ciento, mientras que la del Infonavit y Fovissste fue de entre 4 y 10 por ciento; sin embargo, en confinanciamientos, la tasa de interés subió hasta 14 por ciento.
La banca está enfocada a otorgar créditos para compra de vivienda media y residencial, mientras que Infonavit y Fovissste ahora se enfocan a programas de mejoramiento y ampliación de vivienda, en lugar de adquisición. Por lo que el nicho que está atacando cada uno está reflejando esta diferencia de tendencia.
Del total de créditos que Infonavit otorgó en el primer bimestre de 2016, el 46.2 por ciento fue dirigido a mejoramientos, a través de su programa Mejoravit.
En el caso de Fovissste, el 22 por ciento de los préstamos fueron para ampliaciones y reparaciones, mediante Respalda2-M.
En lo que va de 2016, las empresas de vivienda que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) han registrado caídas de hasta doble dígito en el valor de sus acciones.
Los títulos de Homex, se han ‘derrumbado’ 41.8 por ciento entre enero y el 6 de junio, afectadas por una investigación por parte de la SEC, en Estados Unidos.
Por otro lado, Cadu y Javer, que apenas debutaron el año pasado en el mercado, ya acumulan bajas en el precio de sus acciones. Cadu ha perdido 14.4 por ciento y Javer, 3.8 por ciento.
Geo, que recién salió de concurso mercantil, registra una reducción de 0.96 por ciento, desde su regreso a la Bolsa, en diciembre de 2015.
La única librada de los números rojos es Consorcio Ara, que ha ganado 12.5 por ciento en la BMV hasta el cierre de ayer.
Inversionistas ven en las vivienderas cierta debilidad, debido al tema de subsidios federales, consideró Roberto Navarro, analista del sector de Signum Research.
El primer trimestre de 2016 no reflejó alzas en ventas por la gran acumulación de inventarios del cierre de 2015, por lo que aún las firmas cuentan con grandes volúmenes de casas.