Con la fuerte depreciación del peso frente al dólar que alcanzó más de los 20 pesos por dólar, las gasolinas que se consumen en el país se encarecerán cerca de un 15 por ciento en las próximas semanas debido a que éstas en su mayoría son importadas de las refinerías texanas y de media docena de refinerías internacionales como Holanda,
Arabia Saudita y Singapur, informaron analistas sectoriales.
Las empresas que más han ganado de estos ajustes cambiarios son las petroleras Deer Park Refining Limited Partnership, Shell, Exxon Mobil Corp, Cox Oil, entre otras.
La importación de gasolina en México ascendió a 13 mil 410 millones de dólares durante 2015, colocándolo en el segundo lugar a nivel mundial en este rubro, sólo por debajo de Estados Unidos, que compró combustible con un valor de 20 mil 458 millones de dólares del exterior, informaron analistas sectoriales.
En tercer lugar se colocó Singapur con 12 mil 757 millones de dólares, mientras que Corea del Sur, Holanda y Japón ocupan los lugares 4, 5 y 6, respectivamente.
Entrevistado en el marco del programa radial El Punto Crítico, que dirige Eduardo Ramos Fusther, el analista Ramsés Pech reiteró que en el ajuste al presupuesto, Pemex es uno de los más afectados por lo que se detendrán decenas de proyectos petroleros de la empresa del Estado
Dijo que ante el nuevo escenario, Pemex estará obligada a desincorporar áreas estratégicas de la petrolera como es el transporte o los ductos de gas así como sus debilitadas áreas de Refinación.
Ramsés Pech dijo que Pemex apenas contará con un periodo capitalizable de 6 a 7 años para el área de exploración y extracción y para aumentar su producción de crudo esta urgida y obligada a asociarse con petroleras privadas
Eventual quiebra del sector de refinación
Además, analistas esperan que el país aumente el volumen de la gasolina importada, debido a la disminuida capacidad de refinación de la industria nacional, así como a una mayor apertura comercial emanada de la aprobación de la Reforma Energética, que contempla la liberación total a las importaciones en 2017.
La importación de 12 mil 694 millones de litros durante los primeros 6 meses del año, con un valor total de 4 mil 938 millones de dólares, confirma que el país continuará en segundo lugar a nivel mundial.
El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, había anunciado hace unas semanas que Petróleos Mexicanos se encuentra en negociaciones con tres compañías para la construcción de refinerías en el país, lo que incrementaría la producción de combustible y podría revertir la tendencia.
México se ubicó como el segundo importador de gasolina a nivel mundial, sólo superado por Estados Unidos, mientras se prevé que las importaciones mexicanas sigan creciendo lo mismo por la limitada capacidad de refinación interna que por la apertura comercial de ese energético.
En el 2015, las compras externas mexicanas de gasolina sumaron 13,410 millones de dólares, a la vez que las importaciones estadounidenses fueron por 20,458 millones de dólares.
De acuerdo con Ramses Pech, analista petrolero la reforma energética de México contempla que en el 2017 se permita la libre importación de gasolinas y diesel, y en el 2018 se liberen los precios de dichos combustibles eliminando la actual banda de precios.
Durante su participación en el programa El Punto Crítico, dijo México importó 12,694 millones de litros en la primera mitad del 2016, por un valor de 4,938 millones de dólares, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía.
Del total de su consumo doméstico de gasolina, México importa casi 45%, y enfrenta una necesidad de mejorar sus refinerías existentes para cumplir las normas ambientales y ampliar la oferta.
En un reporte, la consultoría IHS indicó que las aperturas en el sector de la energía en México impulsarán la competitividad económica del país y representan una gran oportunidad estratégica y de negocio para Estados Unidos.
El tercer mayor importador de gasolinas fue Singapur, con 12,757 millones de dólares, seguido por Corea del Sur (11,730 millones), Holanda (11,290 millones) y Japón (11,127 millones).
Estos montos incluyen, además de gasolinas, otros aceites ligeros y preparaciones, que para el caso de México sólo abarcaron 3.3% de su cifra correspondiente. A principios de agosto, Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía, dijo que Petróleos Mexicanos (Pemex) negocia con al menos tres grupos empresariales la construcción de refinerías en México para incrementar la producción de gasolinas.
A pesar de que México se ubica entre los grandes exportadores petroleros a nivel mundial, es un importador neto de productos refinados del petróleo, porque no tiene suficiente capacidad de refinación para satisfacer su demanda interna, ni se han hecho las nuevas inversiones necesarias para procesar crudos pesados como el Maya.
México cuenta con seis refinerías con una capacidad total de 1.54 millones de barriles por día, pero en los últimos años ha operado por debajo de su capacidad debido a contratiempos operativos.
Hasta ahora, más que en la industria de la refinería, la primera gran inversión se ha anunciado en el rubro de transporte de gasolina tras la reforma energética. El mes pasado, TransCanada anunció que se asoció con Sierra Oil & Gas y Grupo TMM para construir una terminal marítima y un ducto de 800 millones de dólares en Tuxpan, obras que permitirán transportar gasolina, diesel y combustible para aviones al centro de México.