Se confirmó que en las últimas semanas Alberto Baillères González uno de los empresarios más prolíferos de México, con negocios que van desde la minería hasta aseguradoras y cadenas departamentales, bajo Grupo Bal, contempla fuertes inversiones en el sector energético ante su creciente apertura.
En 2015, justo cuando arrancó una de las apuestas más grandes en la administración de Peña Nieto para catapultar el sector petrolero y el energético en general, Baillères decidió no quedarse fuera y creó Petrobal, la empresa con la que participaría en la Ronda Uno.
En septiembre de 2015, junto a Fieldwood Energy ganó la cuarta área a licitarse en la segunda fase de la Ronda Uno, la cual comprende de los campos Ichalki y Pokoch, uno con reservas de 70 millones de barriles de petróleo, en tanto que el segundo cuenta 195 millones.
Actualmente, se encuentran en un periodo de evaluación que dura dos años, de acuerdo con el contrato, para proceder con otro año pero de análisis para decidir el desarrollo de los campos. Bajo ese escenario esperan estar extrayendo hacia 2019, según dijo el director general de la empresa, Carlos Morales Gil, en 2016, durante el foro Energy México.
Si bien se trata de una empresa nueva, y un sector reciente para el hijo del fundador del ITAM, lo cierto es que la jugada maestra fue tener como capitán a Morales Gil, que desarrolló la experiencia necesaria en exploración y producción, al estar encargado de estos temas en Pemex, empresa a la que renunció para unirse al proyecto de Baillères.
Hasta ahora, parecía que este era precisamente el único fin de la empresa, sin embargo, como pudo saber LPO por fuentes cercanas a la firma, el interés va más allá de ello, su interés es el de "ir por todo".
Hasta ahora, se sabía que el consorcio conformado por Fieldwood también estaría participando en la Segunda Ronda. Pero no se quedarán solo en el tema de la exploración y explotación. "Les interesa todo: desde extraer, refinar, transportar, almacenar y vender -la oportunidad que nace con la apertura del mercado de las gasolinas-; todo lo que sea posible", indicó la fuente.
Quien ha seguido la historia de sus negocios quizá no tome por sorpresa estas intenciones, pues sin duda, la apuesta del ganador de la Belisario Domínguez por el sector energético, no sólo es tener presencia en uno de los sectores con más auge hoy en día, sino compensar las grandes pérdidas millonarias que le han significado sus negocios mineros, tras la caída de los precios en este sector.