Petróleos Mexicanos planea asociaciones en plantas de hidrógeno en sus refinerías de Madero y Cadereyta, en el norte del país, que podrían concretarse este año, declaró el director general de la empresa, José Antonio González.
Estas dos nuevas asociaciones seguirían a la de la refinería en Tula, en el centro del país, y por la que la francesa Air Liquide suministrará hidrógeno durante 20 años, operará la planta que ya existe e invertirá en una segunda.
"Sacamos la primera alianza en Tula, vamos a sacar otras dos, seguramente Madero y Cadereyta", dijo en entrevista en el marco de la reunión de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.
González no dio detalles sobre el esquema que se implementaría para ambas refinerías ni precisó si sería similar al de Tula.
Pemex tiene seis refinerías, con capacidad para procesar hasta 1.6 millones de barriles por día (bpd). Sin embargo, el proceso se encuentra en niveles bajos y las refinerías registran muchos paros temporales, además de que varias de ellas requieren modernización.
Cadereyta tiene una capacidad de proceso de 275 mil bpd y Madero 190 mil bpd.
"Tú tienes que parar una planta de este tamaño porque no te están dando hidrógeno o tienes que parar una planta de este tamaño porque se te descompuso la planta de tratamiento de agua; no puede ser", dijo González.
"Nosotros tenemos que concentrarnos en la refinación", subrayó.
Pemex, que ha sufrido en los últimos años fuertes recortes a su presupuesto tras la baja de los precios del crudo, anunció el año pasado que buscaría asociaciones en sus refinerías para elevar el procesamiento.
México importa básicamente de Estados Unidos alrededor de la mitad de las gasolinas que consume pues no produce lo suficiente para satisfacer la demanda.