Ciudad de México, 31 de julio de 2019, El secretario de Hacienda y Crédito
Público, Arturo Herrera Gutiérrez, aseguró que "México no está en una recesión técnica".
Durante la conferencia de prensa la Secretaría de Hacienda informó que las Finanzas Públicas están sanas, la deuda es manejable y la economía no crece ni se retrocede, por lo que, Herrera Gutiérrez se presentó para precisar algunos conceptos técnicos y explicar por qué México no está en recesión económica.
El funcionario indicó qué hay varias definiciones de dicho concepto, y una de las más aceptada en Estados Unidos indica que recesión implica una caída significativa y generalizada del ingreso real, empleo, ventas mayoristas, entre otros, y México no está en esa situación, dice.
No obstante, reconoció que sí hay una desaceleración y es un tema que se debe abordar.
La economía mexicana esquiva la recesión por la mínima, pues según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el crecimiento fue de un 0.1% en el segundo trimestre de 2019, según ha informado este miércoles, pese a que el presidente Andrés Manuel López tiene otros datos.
México país, representa a la segunda economía de América Latina, y se encontraba bajo la amenaza de entrar en una etapa recesiva tras registrar una caída del 0,2% en el primer trimestre del año y ante la desaceleración de la economía nacional.
Por lo que el titular de la SHCP explicó que el país se encuentra en una desaceleración constante, pero que ya se cuenta con un plan de acción que se pondrá en marcha desde este año.
"No estamos en una recesión, dijo, estamos en una desaceleración", declaró Arturo Herrera. En el primer trimestre del año, el PIB se redujo 0.2% frente al trimestre anterior y, de producirse otra contracción, el país hubiera entrado en recesión, algo que ya daban por hecho decenas de instituciones financieras.
El discreto crecimiento de la economía en México sucede en el marco de una caída del 3.4% de las actividades primarias, entre las que se encuentra la industria petrolera, así como un estancamiento en las actividades secundarias (manufactura), y un crecimiento del 0.2 % de las actividades terciarias (bienes y servicios).
La mayoría de analistas ven muy complicado que se supere este año el 1%. de crecimiento. El Fondo Monetario Internacional, por ejemplo, situó hace pocos días su estimación para 2019 en el 0,9%.
Las estimaciones de los analistas se basan en la desconfianza en los programas del gobierno y las malas desiciones tomadas en el primer semestre, que han llevado a los inversionistas al pánico y el miedo por desconfianza y falta de seguridad jurídica.