La perspectiva para el sistema bancario de México es negativa debido que la
expectativa de que un menor crecimiento económico ocasionará un incremento en la morosidad y reducirá el volumen de crecimiento de los bancos, estimó Moody’s Investors Service.
La calificadora internacional de riesgo crediticio estimó que este debilitamiento económico podría incrementar la morosidad y desacelerar el crecimiento del negocio de los bancos, y generar restricciones fiscales que limitarán la capacidad del gobierno para dar apoyo a los bancos.
Dado el entorno, la rentabilidad de los bancos mexicanos se verá disminuida por los mayores costos crediticios, añadió la agencia en un nuevo reporte.
“El financiamiento quirografario al consumo y a pequeñas y medianas empresas serán los segmentos que sufran más en una desaceleración económica”, apuntó el analista de Moody’s, Felipe Carvallo.
“Los indicadores de cartera vencida –que se han ubicado en los niveles más bajos de los últimos 13 años al registrar 2.1 por ciento a junio de 2019– podrían incrementar a 2.7 por ciento para 2020, aunque las políticas de originación conservadoras limitarán un mayor deterioro.”
La calificadora señaló que el capital se mantendrá estable, pero incorporará instrumentos de menor calidad.
Los niveles de capital aumentarán debido al menor crecimiento de crédito, pero la menor rentabilidad, el pago de dividendos extraordinarios y las emisiones equivalentes de capital básico adicional o complementario, limitarán las ganancias.
Indicó que la dependencia en financiamiento de mercado continuará siendo limitada, pero la fortaleza de la rentabilidad bajará a consecuencia de los menores márgenes y mayores costos crediticios.
Con todo, Moody’s espera que los márgenes se mantengan entre los más altos de la región, registrando 6.1 por ciento a junio de 2019.
Destacó que la disposición del gobierno para dar apoyo a los bancos continuará siendo alta, con base en sus antecedentes de apoyo para los bancos.