La continuación de la tendencia a la baja en la inversión productiva en México, representa el principal factor de riesgo para la recuperación de la
economía, consideró hoy el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
El CEESP indicó, no obstante, que existen otros factores que podrían impedir a la economía abandonar su estado de estancamiento, como la sostenibilidad de las finanzas públicas en un estado saludable, así como la preservación de la seguridad y el estado de derecho.
"En conjunto, la posibilidad de una caída persistente de la inversión podría ser el principal factor de riesgo de carácter interno que inhiba el crecimiento, con los costos asociados en términos de generación de empleo y mejoría de la situación de los hogares", indicó el organismo en su reporte semanal.
De acuerdo con las cifras oficiales más recientes, la inversión que realizan las empresas en México cayó un 5,2 por ciento entre enero y octubre de 2019, por un menor gasto empresarial en construcción y en maquinaria y equipo.
Sostuvo que además de los riesgos de carácter interno, México también se enfrenta a un escenario internacional adverso, ante presiones y problemas de orden geopolítico, que podrían afectar a la estabilidad global.
El organismo, que depende del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) resaltó además que la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) de libre comercio dará mayor certidumbre a la inversión en el país.
Indicó que además está el equilibrio fiscal, en que se percibe la determinación del gobierno a sostenerlo.
"También desde el punto de vista macroeconómico resalta la estabilidad del sistema financiero y del tipo de cambio, todo ello aleja al país significativamente de las crisis que ha vivido en el pasado", agregó.
El central Banco de México (Banxico) ha estimado un crecimiento de la economía mexicana de entre un 0,8 y un 1,8 por ciento en 2020.
La mayoría de las proyecciones económicas para el año que recién terminó se ubican en alrededor de una nula expansión e incluso algunos expertos han estimado una caída marginal.
En 2018, la economía mexicana, la segunda mayor en América Latina después de Brasil, se expandió un 2,1 por ciento.