Ciudad de México, 13 de octubre 2020, - La autoridad antimonopolios de México pidió el martes a la Secretaría de Energía (Sener) la renovación de una treintena de permisos de importación de gasolinas a punto de vencer, en medio de una campaña del Gobierno por favorecer a empresas estatales.
Alejandra Palacios, presidenta de la COFECE, aseguró que 27 permisos de importación vencerán este año, lo que dejaría 55 vigentes, pero casi el 60% de ellos con validez sólo por un año, ya que la SENER no ha reiniciado las autorizaciones que suspendió en marzo debido a la pandemia del coronavirus.
“Es importante que se reanuden porque si no al final del año quedaríamos con 32 permisos de importación de 82 con los que arrancamos el año”, dijo Palacios a periodistas al presentar un documento de la Cofece con propuestas para la reactivación de la economía, golpeada por la epidemia.
México es altamente deficitario en gasolinas. Hasta agosto, la petrolera estatal Pemex -la única que produce combustibles en el país- había elaborado en promedio 194,000 barriles por día (bpd) de gasolinas, pero importado 380,000 bpd, en un año atípico de bajo consumo por el freno en la actividad económica y la movilidad debido a la pandemia.
La Suprema Corte de Justicia estudia una controversia constitucional de la Cofece contra una política del Gobierno sobre el sector eléctrico que considera afecta la estructura económica de la industria y da al Estado más poder para decidir quién puede generar electricidad, a la vez que otorga mayor presencia a la estatal CFE en detrimento de sus competidores.
Las modificaciones en el sector eléctrico, aunados a cambios ordenados hace unos días por el regulador energético CRE para restringir la asociación de empresas bajo la figura de autoabastecimiento eléctrico, se dan en medio de una abierta política del gobierno mexicano por favorecer a Pemex y la CFE.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, admitió a finales de septiembre que buscará revertir en 2021 la profunda reforma energética realizada en la administración previa si no logra fortalecer y “rescatar” a las dos empresas estatales con el marco legal actual.
Esto, después de una reunión con reguladores del sector, a los que pidió no dar más autorizaciones que ayuden a empresas privadas y extranjeras a aumentar su presencia en el sector energético nacional, específicamente frenar la expedición de permisos para nuevas estaciones de servicio.