MEXICO, 17 de agosto 2021.- Especialistas del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) indicaron que México requiere un mejor desempeño de políticas públicas para romper el ciclo de preservación de la pobreza entre las familias, en especial ante la crisis sanitaria por el COVID-19.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la población en situación de pobreza aumentó de 41.9% a 43.9% entre 2018 y 2020 y la pobreza extrema registró un repunte de 7.0% a 8.5% durante el mismo periodo, lo que representa un incremento de 2.1 millones de personas.
Un evento como la pandemia es un factor de peso al considerar las crisis económicas y sociales, en tanto provocó el choque mundial de cadenas, industrias y sectores. Sin embargo, “la política pública y el presupuesto pueden y deben adecuarse ante ese choque”, comentó el CEESP.
En cuanto al país, el desempeño de las políticas públicas reflejó una falta de planeación, y prioridades equivocadas por parte del gobierno.
Según datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), la efectividad de la política social del Gobierno actual es cuestionable, y presenta más un retroceso que apoyo. En materia de salud, el gasto de los hogares aumentó 40.5%, mientras otros sectores presentaron reducciones.
El número de habitantes sin acceso a servicios de salud incrementó 15.6 millones, quienes contaban con dicho acceso antes de 2018.