La crisis financiera internacional, la caída de la demanda de hidrocarburos, y los compromisos fiscales y de pensiones presiona a Petróleos Mexicanos en sus finanzas, ya que en el primer trimestre de este año reporta pérdidas netas por cuatro mil 388 millones de pesos un resultado que revierte los beneficios obtenidos en el mismo periodo de hace un año, cuando tuvo una utilidad neta de 40 mil 397 millones de pesos.
Así la paraestatal comienza a ceder y dejar de ser la caja chica del gobierno federal por lo que se deberán de diversificar los impuestos y depender menos de la petrolera, dijo el director corporativo de Finanzas de Pemex, Mario Alberto Beauregard Álvarez, explicó que tal resultado fue consecuencia de “menores ingresos por ventas, mayores costos y gastos, menor ingreso por la tasa negativa del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) y un menor resultado integral de financiamiento”.
En entrevista con varios medios de comunicación el funcionario reiteró que el pasivo que le está golpeando directamente a su flujo de efectivo y operación son el pago de las pensiones que ya tienen un monto extraordinario que ya es imposible manejar con el actual esquema. El pasivo de pensiones alcanza ya los 1.3 billones de pesos al año y que equivale a cerca del 60 por ciento de sus ingresos.
Parte de los resultados negativos de Petróleos Mexicanos se debieron a la crisis internacional, a “una acumulación significativa de inventarios en el mercado de Norteamérica”, y a los menores precios del crudo mexicano de exportación, que cayó de 111.4 dólares por barril en el primer trimestre de 2012 a 104.7 dólares en el mismo periodo de este año, es decir, 6 por ciento.
Otro factor que afectó a la petrolera fue la apreciación del peso mexicano “de casi 4%” respecto al primer trimestre de 2012, lo que tuvo “un impacto considerable” en los resultados de la paraestatal.
Beauregard Álvarez precisó que los ingresos totales de Pemex ascendieron a 396 mil millones de pesos de enero a marzo de 2013. Pero los impuestos que generó la empresa fueron de 224 mil millones de pesos.
Durante el trimestre en referencia, el ebitda (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) fue de 269 mil millones de pesos, argumentó el funcionario de Finanzas.
La producción de hidrocarburos promedió 3.7 millones de barriles diarios de petróleo crudo equivalente en ese periodo, y la de crudo, 2.54 millones de barriles por día, 0.15 % más que hace un año, gracias a una mayor producción de crudo ligero de los campos Kuil del Activo Abkatún-Pol Chuc, de la Región Marina Suroeste y Gasífero del Activo Veracruz, de la Región Norte.
Petróleos Mexicanos informó que las reservas 3P (probadas, probables y posibles) totalizaron 44 mil 130 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, de las cuales 56 % están en regiones marinas y 34 % en la zona de Chicontepec, en el Este de México.
URGE MODIFICAR SISTEMA DE PENSIONES
El director corporativo de Finanzas de Petróleos Mexicanos (Pemex), Mario Alberto Beauregard Álvarez, plantea modificar el sistema de pensiones de la paraestatal, para lo cual llevará a cabo pláticas con el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
“Lo que vamos a hacer es entrar en pláticas con el sindicato para modificar el régimen de pensiones de Pemex a uno compatible con las Afores como lo han hecho otras instituciones del gobierno mexicano”, dijo.
Pemex tiene cerca de 140 mil empleados, de este total cerca de 115 mil están dentro del STPRM, el resto son mandos medios y funcionarios de la empresa, además en su régimen tienen registrados alrededor 70 mil jubilados y pensionados.
Los cambios en el esquema de pensiones de petroleros se debe a los altos niveles de pasivos laborales que tiene la paraestatal y suman 1.3 billones de pesos, señaló el funcionario.
En las negociaciones que se llevarán a cabo con el sindicato petrolero las opciones que se le presentarán son las siguientes: que los petroleros en activo se mantengan en el actual esquema de pensiones o se muden a uno de cuentas individuales similares a las Administradoras de Ahorros para el Retiro (Afores).
Pero, una vez que se tenga un acuerdo con el sindicato, todos los nuevos empleados deberán de ingresar directamente a este esquema.
“Aquellos que ya sean trabajadores de Pemex tendrán la opción de poder, quedarse como están o migrar hacia un esquema de pensiones basado en cuentas individuales, y los nuevos trabajadores, en cierto momento, entrarán a trabajar en Pemex con un nuevo régimen de pensiones”, dijo.
De acuerdo con la empresa las negociaciones con el sindicato empezarán a más tardar en un par de semanas y los acuerdos del Contrato Colectivo de Trabajo se darán a conocer a finales de julio próximo.
Beauregard Álvarez anunció que se respetaran los derechos de los trabajadores ya pensionados o jubilados.
“Esto implica que vamos a respetar en todo momento los derechos de las personas ya jubiladas, quienes tienen ya una pensión”, añadió.
La meta es reducir la presión que implica tener un pasivo laboral que en este momento es igual a 1.3 billones de pesos, se espera que conforme se muden los trabajadores en activo a cuentas individuales se reduzcan los pagos que se deben de hacer y mejore el perfil financiero de Pemex.
El nuevo esquema de cuentas individuales para trabajadores les permitirá migrar a un nuevo esquema de pensiones y mientras más alto sea este número mayor será el éxito.
El nuevo esquema no cambiará ni los montos ni las condiciones en que las personas ya jubiladas reciben su pensión, pues el esquema aplicará para los trabajadores activos y los que se integren.
“Todos aquellos que ya reciben una pensión, siguen recibiendo exactamente los mismos recursos y todo dependerá de la cantidad de trabajadores actuales que migren al nuevo esquema de pensiones y con el tiempo las obligaciones pensionarias de la empresa disminuirán”.
La paraestatal informó que en conjunto con el sindicato petrolero sostendrán pláticas a fin de impulsar un esquema pensionario que pueda ser económicamente viable para la empresa, sin que ello afecte directamente los derechos de los trabajadores.
“Tomando en cuenta las condiciones prevalecientes en los mercados financieros internacionales, en particular en un ambiente de bajas tasas de interés, el pasivo laboral de la empresa al 31 de marzo del presente año se valuó en 1.3 billones de pesos”, citó Pemex.
Sobre este tema, Mario Beauregard, director corporativo de Finanzas de Pemex, aseguró que tan solo al cierre de 2012, la reserva de beneficios a empleados registró un saldo de casi 1.3 billones de pesos, lo que significó un incremento de 49 por ciento respecto a los 862 mil 79 millones pesos que se alcanzaron a diciembre de 2011.
En conferencia, el directivo explicó que se busca respetar los derechos de las personas jubiladas y de aquellos que trabajan en la paraestatal, toda vez que se les dará opciones para poder migrar hacia un nuevo esquema, no obstante que los nuevos empleados ya entrarán bajo un nuevo régimen de pensiones.
Por su parte el especialista Raymundo Tenorio Aguilar, director de la carrera de Economía de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey, aseguró que es urgente cambiar el esquema de pensiones de la paraestatal, de lo contrario a futuro la empresa deberá pedir préstamos adicionales para poder pagar los beneficios a los empleados, por lo que la situación es insostenible.
El también especialista en temas financieros, aseguró que si ahora los pasivos acumulados en 2012 son equivalentes a 62 por ciento de los ingresos totales de la paraestatal, de continuar esta tendencia, al cierre de 2013 esta cifra ascenderá a 65 por ciento.
PÉRDIDAS POR 4 MIL 388 MDP
El reporte financiero correspondiente a los primeros tres meses del año revela que Pemex registró una pérdida de 4 mil 388 millones de pesos, lo cual se derivó de un incremento en sus costos de ventas y gastos generales.
El resultado negativo del primer trimestre también tiene que ver con una reducción de 3.7 por ciento en los ingresos totales, los cuales ascendieron a 396.2 miles de millones de pesos.
Dicha tendencia también tiene que ver con una disminución de 2.5 por ciento en los volúmenes de exportación a los mercados internacionales.