En víspera de que la reforma financiera llegue a la Comisión Permanente que sesionará este miércoles diputados y senadores del PRD advirtieron que es necesario discutir el fortalecimiento de una nueva arquitectura del sistema financiero, mientras que Manlio Fabio Beltrones, coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, aseguró que su bancada trabajará de inmediato para construir un consenso, convocar a un periodo extraordinario de sesiones y aprobar el proyecto.
Sobre el proyecto enviado por el Ejecutivo, Beltrones indicó que "nos dispondremos a trabajar de manera inmediata, para contar con un marco jurídico que resulta indispensable y urgente para impulsar el crecimiento", indicó durante una reunión con los priistas que participan en la Comisión de Hacienda, y agregó que "compartimos la urgencia de una reforma financiera que active el crédito bancario y el aparato productivo para fortalecer el mercado interno y la generación de empleo", expresó el priista.
En contraste, senadores y diputados del Partido de la Revolución Democrática (PRD) aseguraron que la reforma está incompleta y no atiende cuestiones estructurales, indispensables para mejorar el sistema financiero y, especialmente, el servicio de millones de usuarios.
En un comunicado conjunto, los perredistas advierten que es necesario discutir el fortalecimiento de una nueva arquitectura del sistema financiero que responda a los requerimientos de un crecimiento sostenido, pero que además centre sus propuestas en beneficios directos para los mexicanos.
"El Congreso está obligado a garantizar la rectoría del Estado en el sector bancario y que existan condiciones de plena competencia, que garanticen la disminución del costo financiero y eleve el crédito al sector productivo en función de las metas del crecimiento económico que requerimos como nación", se indica en el pronunciamiento firmado por los senadores Armando Ríos Piter, Benjamín Robles, Zoe Robledo y Mario Delgado.
Delgado advirtió que se requiere una intervención del Senado para no pensar en una reforma financiera sólo en función de los bancos, sino también de la gente, de los usuarios de la banca.
"Esta reforma parece que está pensada sólo en función de los banqueros, en darle mucho más garantías y acorralar a los usuarios, a los cuentahabientes; lo que se está planteando es que ahora se fortalezcan las garantías y se vuelva más vulnerables a los acreditados", dijo el ex Secretario de Finanzas del Distrito Federal.
Se requiere una intervención importante del Congreso del Senado para no pensar en una reforma financiera solo en función de los bancos, sino pensarla a través de la gente.
La reforma financiera no enfrenta el reto de impulsar la competencia y el desarrollo nacional, aseguró el senador Mario Delgado, al advertir que el Congreso “tendrá mucho que hacer para fijar medidas que pongan a los bancos a competir por mayores utilidades a través de la búsqueda de proyectos rentables y con un alto potencial de crecimiento para el país”.
Mismo que expresó que se debe pensar en los usuarios de la banca, de que los mexicanos tengamos la oportunidad de accesar al financiamiento y regular las comisiones.
El legislador añadió que esta reforma parece que está pensada solo en función de los banqueros, en darle mucho más garantías y acorralar a los usuarios, a los cuentahabientes; lo que se está planteando es que ahora se fortalezcan las garantías y se vuelva más vulnerables a los acreditados.
El ex secretario de Finanzas del D.F. expuso que las comisiones son altísimas, tienen que regularse; lo mismo, los enormes diferenciales que hay entre las tasas activas y pasivas; el crédito al consumo se ha venido expandiendo, pero tiene un costo muy elevado y son muy pocos lo que tiene acceso a hipotecarios, a otros tipos de créditos que puedan mejorar sus condiciones de vida.
En sus comentarios sobre la reforma financiera, recién presentada en el marco del Pacto por México, el legislador del PRD, aseguró que hay que hacer una revisión muy seria a sus planteamientos, en temas como el de las comisiones (“en un cajero automático se cobra hasta 35 pesos por operación”), la gran mayoría de las utilidades de los bancos las obtienen de las comisiones, o de la tenencia de bonos gubernamentales, que sin esfuerzo ni riesgo alguno les dan amplios intereses.
Esos son los peores incentivos para que haya crédito, ya que los bancos siempre van a buscar tener el menor riesgo posible y la mayor utilidad, en eso consiste su negoció. Si tienen la posibilidad de cobrar altas comisiones y además la de estar financiando al gobierno y de ahí tener utilidades, pues nunca van a prestar, dijo.
No hay coincidencia entre los intereses que tiene los bancos, que obedecen a un interés global o del país de donde ellos provienen, con la necesidad que tiene México de financiamiento y desarrollo. Hay dos intereses muy distintos: el del banco global, con su dinámica de tener utilidades que en México obtienen para transferirlas a sus casas matriz-, con el de los mexicanos que requieren crédito accesible para el desarrollo.