Los sistemas de pensiones de 19 entidades federativas del país (60 por ciento del total) presentan presiones financieras, pero los casos más graves son Colima, Morelos y Querétaro, pues incluso carecen de un régimen pensionario, de acuerdo con aregional.com.
La subdirectora general técnica de la firma, Flavia Rodríguez Torres, advirtió que si estos tres estados no crean o institucionalizan sus sistemas de pensiones, en un lapso de 10 a 15 años podrían "colapsar" sus finanzas, pues en la actualidad éstos se pagan con gasto corriente.
Señaló en rueda de prensa que sólo 13 de los 32 sistemas de pensiones de las entidades federativas (40 por ciento restante) son sustentables a largo plazo, pues no tienen problemas de viabilidad.
Al presentar su informe Situación de los sistemas de pensiones en las entidades federativas, la directora general de finanzas públicas de la firma, Flavia Rodríguez, dijo que los estados con la posición más delicada son Estado de México, Durango, Guerrero, Oaxaca, Baja California, Chiapas, Chihuahua, Nayarit, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz, Zacatecas, Michoacán, San Luis Potosí, Tlaxcala, Yucatán, Colima, Morelos y Querétaro.
La experta reconoció que el problema es serio y se trata de una bomba de tiempo, ya que en el caso de varios de esos estados la situación se puede colapsar entre 10 y 15 años y por eso la urgencia de reformar el sistema en este momento.
Sin embargo, un gran problema por el que se han pospuesto las reformas al sistema de pensiones en algunas entidades provienen de las presiones políticas y sociales de los sindicatos de los trabajadores, ya que son renuentes a los cambios que deben implementarse para resolver la viabilidad financiera de los sistemas.
Comentó que este pasivo contingente se ha agudizado debido a la menor generación de empleos formales, al cambio del bono demográfico y a la mayor esperanza de vida que tienen las personas.