Fue una mañana distinta en el Centro de Rehabilitación Infantil Teletón de Tlalnepantla. Las paredes multicolores contrastaron con los rostros desencajados de varios colaboradores que aún no asimilaban la noticia. De un plumazo, médicos, terapeutas,
psicólogos y personal administrativo habían perdido su trabajo sin previo aviso.
Así como sucedió en Tlalnepantla, ese mismo escenario se repitió en los 23 centros Teletón del país. Ya había signos de alarma, primero fueron rumores y al final, se transformaron en una realidad.
La noticia corrió como reguero de pólvora entre los 3,105 colaboradores que forman parte de la plantilla laboral de los CRITs. Muchos de ellos ya lo sospechaban y ese miércoles confirmaron sus temores de que pasarían a formar parte de la lista de los desempleados, según la versión oficial, por falta de presupuesto.
No fue parejo
“No sé si tengo buena o mala suerte de haberme quedado, ya que hubo movimientos en nuestros horarios de trabajo, la presión es mucha, veo en todos lados malas caras, y además, se suspendieron las terapias del turno vespertino”, comentó una de las colaboradoras del CRIT Tlalnepantla, quien pidió el anonimato por temor a represalias.
“Muchos de nuestros compañeros se fueron molestos, pues consideraron que quienes se quedaron no estaban comprometidos con los valores de la fundación y que muchos eran sus amigos. Incluso había quienes estaban dispuestos a reducir su salario con tal de no perder su empleo, pero al final no los escucharon”, señaló la entrevistada.
“Ahora tengo incertidumbre de no saber qué sucederá mañana. Ya perdí la confianza. Sólo me queda cumplir con profesionalismo y esperar a que el rumor de otro recorte no me afecte”, agregó.
En su oportunidad, otro de los trabajadores afectados señaló que el despido “no fue parejo” ya que sólo se tocaron áreas como Intendencia, administrativos, terapias y hasta a personal con discapacidad.
“En cambio, en el Corporativo no se tocó ni a los directivos que ganan sueldazos de hasta 80 mil pesos, ni tampoco áreas como son Relaciones Públicas, Producción, Imagen y Recaudación en donde se sabe que están sus amigos. Según el recorte fue parejo y eso es mentira”, agregó.
Crisis económica y credibilidad
Desde el año 2014, Fundación Teletón ha sido objeto de una serie de cuestionamientos que fueron desde la relación con Televisa, el llamado que hizo la ONU a no donar a Teletón y los sucesos de Ayotzinapa y la Casa Blanca que la llevaron a una fuerte crisis de credibilidad que dio como resultado que por primera no se cumplieran con su famosa meta.
Ésta crisis de credibilidad y transparencia, tuvo otras consecuencias como fue el hecho de que muchas empresas patrocinadoras y donantes les retiraran su apoyo.
Apenas en el año 2015, Fundación Teletón intentó recuperar su imagen a través de una ambiciosa campaña publicitaria y de redes sociales llamada “Ven, conoce y decide” en donde los Centro Teletón “abrían sus puertas” y les mostraban a los mexicanos la forma en la que se invertían sus donativos.
Y según su propio sitio web, en la parte de la presentación de los estados financieros del año 2014, en sus 16 páginas muestran a una Fundación Teletón fuerte, estable y por lo cual se podría adoptar la dinámica de que en el año 2015, en lugar de cumplir con una meta de dinero, ahora se fijara una meta de 500 mil visitas.
“Chobi”, no dio la cara
“Si gastaron tanto dinero para limpiar su imagen, entonces por qué no hicieron lo mismo para salvar nuestros empleos. ¿Era mentira que había recursos para cuatro años sin problemas?”, señaló Esteban, uno de los trabajadores despedidos de uno de los 23 Centros Teletón que en breve interpondrá una demanda laboral.
“Dicen que eran incluyentes y que repudiaban la discriminación. Resulta que semanas antes comenzaron a dejarnos sin tareas, a prácticamente irnos relegando y sólo unos cuantos estaban activos. Era obvio, ya sabían a quienes iban a despedir y se quedaron sus cuates”, comentó el ex colaborador.
“¿Sabe qué fue lo más humillante?, que el flamante Presidente de Fundación Teletón, Fernando Landeros nos dio la noticia de nuestro despido a través de un video. Simplemente no dio la cara, es fácil escudarse atrás de una cámara y pedir comprensión. Eso sí, solo se quedaron los amigos de los directores, a ellos no los tocaron”, agregó.
“Ahora resulta que la culpa fue de “La Gaviota” y de #NiUnPesoMasAlTeleton lo que ocasionó que no hubieran recursos, cuando en realidad fue su incapacidad de reaccionar ante los problemas y sus pésima administración. Nos pidieron que nos pusiéramos la camiseta, participamos en sus campañas y ahí estuvimos al pié del caños y hoy, simplemente nos abandonan”, narró.
“¿Cuál fue el criterio para el despido? Ni nosotros lo supimos. Siempre escuchábamos a nuestros directores decir que Fundación Teletón tenía dinero para operar cuatro años sin problemas. Ahora nos damos cuenta que sus cálculos fallaron y no se pudo llegar ni a la meta de 500 mil visitas (aunque en la televisión se dijo una cosa) y mucho menos a la meta de recaudación económica”, sostuvo.
“Usaron la visita del Papa Francisco para despedirnos y que nadie supiera. ¿Ahora qué voy a hacer? Por el momento iré con un abogado laboral y me defenderé porque lo que me quieren dar como indemnización no es justo”, finalizó.
Negro panorama
Hoy, las familias de los cerca de 10,127 niños que son atendidos en los CRIT, 255 menores con autismo y los 108 niños que reciben tratamiento en el Hospital Infantil Teletón de Oncología no saben que sucederá con sus consultas, si habrá un aumento en los precios y sobretodo, si se mantendrá la calidad y tiempo de sus terapias.
En algunos centros de rehabilitación, las paredes multicolores contrastan con el ambiente que se vive, la atención del turno vespertino fue suspendida sin previo aviso, en otros casos se reprogramaron consultas sin tomar en cuenta que muchos de los padres de familia gastan sus pocos recursos para ir al CRIT.
Hoy no hay alegría, hoy todo es confusión.