Un estudio aplicado a la población femenina ingresada por primera vez al Cereso de Morelos revela que el total de la muestra reporta haber sufrido violencia intrafamiliar previa a su reclusión.
La doctora Patricia Martínez Lanz, investigadora de la Academia Mexicana de Ciencias, institución que forma parte de la Mesa Directiva del Foro Consultivo Científico y Tecnológico, responsable del estudio, informó también que 78 por ciento de las reclusas presentó niveles altos de este tipo de agresión y 22 por ciento había enfrentado violencia grave.
Aunado a lo anterior, los datos que se obtuvieron por parte de la científica, quien también pertenece al Centro en Investigaciones Interdisciplinarias de la Universidad Anáhuac México, revelaron que más del 50 por ciento de las mujeres estaban recluidas por tráfico de drogas, evidenció el estudio: Factores de riesgo predisponentes a la delincuencia en una población penal femenina (2008).
La investigación se basó en la elaboración de un cuestionario estructurado, autoaplicable y anónimo que proporcionara información sociodemográfica y familiar de las mujeres antes de ser recluidas de acuerdo con un comunicado de la AMC.
Con referencia a la escolaridad, el análisis destaca que, al momento de la reclusión, 27.5 por ciento de la población estudiada tenía estudios de primaria terminados y 30.2 por ciento incompletos; 19.5 por ciento secundaria concluida y 13.5 por ciento inconclusa; 3.4 por ciento preparatoria terminada y 3.2 por ciento incompleta, y solo el 2.7 por ciento obtuvo una licenciatura.
Entre los resultados más relevantes de la investigación en cuanto al entorno emocional, se destaca que las reclusas desarrollan estados de depresión durante su estancia en el Cereso.
“El 33 por ciento mostraba depresión moderada o leve, 47 por ciento depresión alta y 20 por ciento depresión severa, situación que en parte tenía relación con la presencia o no de los hijos dentro del penal. Del 86 por ciento de reclusas con hijos, 21 por ciento los mantenían con ellas en el penal, y estas mujeres reportaron los niveles más bajos de depresión”.
Entre las conclusiones del estudio, se detectó que la violencia intrafamiliar es uno de los principales factores que se asocian a la conducta delictiva en mujeres, mientras que para los hombres prevalecen las adicciones, en especial el consumo de alcohol.
“Una vez que identificamos estos factores de riesgo que preceden la conducta delictiva, elaboré y propuse un tratamiento de psicoterapia breve enfocado en atender dichas problemáticas específicamente para hombres y mujeres recluidos en el Cereso de Morelos”, dijo la investigadora.
En la actualidad, Patricia Martínez trabaja en un estudio nacional que incluye a los 16 Centros Federales de Readaptación Social (Cefereso) del país, para entender qué propicia la delincuencia en México y los impactos que esto tiene en el aumento de personas detenidas.
Respecto del impacto de este tipo de estudios en estrategias de prevención de conductas delictivas, la especialista señaló que a partir de los resultados se pueden crear nuevas estrategias e intervenciones. Una de ellas es que las personas privadas de su libertad, antes de salir de reclusión, puedan recibir psicoterapia breve para que su reinserción a la sociedad sea exitosa.
Pie de foto: Un estudio nacional que incluye a los 16 Centros Federales de Readaptación Social (Cefereso) del país, que encabeza la especialista Patricia Martínez, se concentra en comprender las causas que propician la delincuencia en México y los impactos sociales y económicos que este fenómeno implica. (Foto: AMC).