La ONU aprobó el lunes una declaración de mínimos sobre la condición de la mujer, que
intenta preservar los logros amenazados en varios países pero no busca nuevas vías para avanzar en la igualdad de género.
La declaración fue aprobada por consenso en la 64ª sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, reducida por el riesgo del coronavirus a su sesión de apertura cuando en realidad debía durar hasta el 20 de marzo y reunir a 12.000 participantes.
Debido a la epidemia, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, propuso a los estados miembros circunscribirse ahora a la declaración política, que se negocia cada cinco años, y eliminar los debates generales y los eventos relacionados, pospuestos hasta una fecha indeterminada.
"Siglos de discriminación, patriarcado arraigado y misoginia han creado una enorme brecha de poder entre los sexos en nuestras economías, sistemas políticos y sociedades. Esto simplemente debe cambiar", dijo Guterres en la apertura de la reunión.
El texto adoptado retoma las líneas principales de la Declaración de Pekín que, en 1995, impulsó la emancipación y la promoción de la mujer en todo el mundo, definiendo objetivos para la igualdad de género en diversas áreas, incluida la economía, la lucha contra la violencia, las mujeres en el poder o las mujeres y el medio ambiente.
Francia prevé acoger en julio una conferencia de la ONU llamada "Pekín+25" para hacer seguimiento y desarrollar los logros relacionados con la condición de la mujer durante el último cuarto de siglo.
Su "situación no está en el nivel en que debería estar después de todos estos años desde la reunión en Pekín", señaló el embajador de la Unión Europea ante la ONU, el sueco Olof Skoog. "No es un problema de interés, es porque hay un impulso político activo para un retroceso en varios países", explicó a los periodistas.
Para evitar el fracaso en alcanzar un acuerdo, los negociadores del texto eliminaron cualquier referencia a la salud sexual reproductiva, mención a la que se ha opuesto desde hace años Estados Unidos al verla como un estímulo para el aborto, y referencias relacionadas con la familia, interpretadas de manera restrictiva y conservadora por Rusia, Arabia Saudita, Egipto o Argelia, según diplomáticos.
- Discriminación, vulnerabilidad -
"La ambición de este año era proteger lo que tenemos en lugar de lograr avanzar en los temas", coincide Skoog.
La declaración expresa "la preocupación" de los países de la ONU por que "los progresos no sean lo suficientemente rápidos o profundos", mientras que "en ciertos ámbitos son desiguales y persisten brechas importantes".
Por ejemplo, en el ámbito político, señala un diplomático: tres parlamentarios de cada cuatro en el mundo son hombres.
"En algunas áreas, el avance hacia la igualdad de género se ha estancado, si es que no se ha revertido", dijo Guterres.
"Algunos países han revocado leyes que protegen a las mujeres de la violencia; otros reducen el espacio cívico; otros aún siguen políticas económicas y de inmigración que discriminan indirectamente a las mujeres. El acceso de las mujeres a los servicios de salud sexual y reproductiva está lejos de ser universal. Tenemos que contrarrestar el retroceso", dijo.
El texto de la ONU también reconoce que "25 años después de la Declaración de Pekín, ningún país ha logrado la igualdad de género".
"Niveles significativos de desigualdad persisten a nivel mundial y muchas mujeres y niñas experimentan formas múltiples y combinadas de discriminación, vulnerabilidad y marginación a lo largo de sus vidas", dice la declaración de la ONU.
En materia de violencia contra las mujeres, colocada en el tapete por el movimiento #MeToo, los firmantes se comprometen a "eliminar, prevenir y responder a todas las formas de violencia y prácticas nocivas contra las mujeres y las niñas". Y ello, "en los ámbitos público y privado, incluso a través de las redes sociales".
Asimismo, prometen combatir la "trata de seres humanos y la esclavitud moderna" y "garantizar el acceso a la justicia y la prestación de servicios de apoyo, incluidos los servicios legales, de salud y sociales, a todas las mujeres víctimas de violencia", precisó la declaración.