astronomía, arte, arquitectura y la creación del cero, se preparan para dar nueva vida a la Región Mundo Maya.
"En México relanzaremos la Región Mundo Maya para cautivar a más de 22 millones de turistas de Europa, Estados Unidos y Canadá", explicó a Efe Jorge Manos Esparragoza, secretario de Turismo del sureño estado Campeche, la región del país con menos incidencia de la covid-19.
Campeche, que junto con Yucatán, Quintana Roo, Tabasco y Chiapas forma parte del Mundo Maya de México, está "protocolizando temas de bioseguridad y buenas prácticas con los estados vecinos para detonar ese proyecto turístico".
Los cinco secretarios de Turismo de las regiones que conforman el Mundo Maya de México trabajan unidos "para dar a conocer los nuevos productos".
"Firmamos un convenio con el secretario de Turismo federal, Miguel Torruco, y los países de Belice, Honduras, El Salvador y Guatemala, que también conforman en Mundo Maya, para dar a conocer nuevas rutas e impulsar, entre otras cosas, el turismo comunitario", describió.
El funcionario dijo a Efe que, cuando la pandemia lo permita, se lanzarán con decisión para conquistar a los visitantes europeos y americanos.
"El Mundo Maya de México tiene mucho que ofrecer: playas, cenotes, la Ruta del Cacao en Tabasco, majestuosas zonas arqueológicas y hasta una ciudad amurallada que quisieron invadir los piratas denominada San Francisco de Campeche, que es patrimonio de la Humanidad", observó.
Jorge Manos manifestó su entusiasmo por la próxima llegada del Tren Maya, proyecto emblema del Gobierno federal, "porque impulsará una movilidad terrestre nunca antes vista en el sureste de México".
Ante el impacto y la importante derrama económica que traerá a los cinco estados el renovado Mundo Maya, también están capacitando a los prestadores de servicios turísticos con el objetivo de "conectar y brindar bioseguridad a millones de visitantes locales, nacionales e internacionales".
Países de Centro América relanzarán el Mundo Maya
Mérida, Yucatán, México, 26 enero 2021, - México, Guatemala, Belice, El Salvador y Honduras, herederos de un legado prehispánico que sigue cautivando por su sabiduría en