Al mencionar que la crisis hospitalaria no ha sido superada y que en la medida que las finanzas estatales se vayan saneando, poco a poco se irá recuperando el estado, el mandatario Arturo Núñez Jiménez anunció que la deuda que se heredó es de 20 mil millones de pesos, al confirmar que en una solo averiguación previa en contra del ex mandatario “se tiene un desfalco de cinco mil 400 millones de pesos”,
En este sentido, el gobernador sostuvo que ha sido difícil lidiar con el desfalco de la administración anterior, “por lo cual, en medida que se vaya mejorando la situación, las acciones estarán llegando como tiene que ser”.
Y aseguró que en una sola averiguación previa se ha observado un desfalco por 5 mil 400 millones de pesos "y una buena parte de estos, en el sector salud".
Mencionó que aún se mantienen las investigaciones y que se está tratando de hacer lo necesario para ir saliendo de los pendientes, principalmente en el sector salud.
Señaló que para superar la crisis que también se debe a los cambios de reglas en la asignación de recursos federales se está avanzando en las negociaciones con la federación para la creación de una fondo compensatorio que restituya una parte de lo han ido perdiendo por la reducción de las participaciones petroleras.
Y reconoció las cifras de la deuda no cuadran con las emitidas con la SHCP, puesto que en promedio se pierden 6 millones de pesos de manera anual “Por ello tenemos dificultades, pero no será razón para que no la superemos, pelearemos por un fondo federal para Tabasco”.
Anunció que se gestionan recursos para garantizar el acceso a la salud y profesionalización del personal del sector.
El mandatario tabasqueño aprovechó la oportunidad para informar que ya entabló pláticas con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), para que Tabasco cuente con un fondo como estado productor de hidrocarburos. “El petróleo es de todos, pero también las entidades productoras merecen un apoyo”, puntualizó.