Villahermosa, Tabasco.- Reconoce el ombudsman tabasqueño Manuel Argaez de los Santos, que se iniciaron cuatro quejas que presentaron trabajadores de los medios de comunicación por diversas violaciones en contra de esta actividad, sobre todo en los municipios, al destacar que “es en el interior del estado, donde se presentan estas
incidencias”.
En este sentido, el presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) informó que estas denuncias tienen que ver con amenazas, intimidación, daños en propiedad ajena, de sus herramientas de trabajo, pero reitero que “sobre todo de los municipios que es donde se ha registrado la intolerancia”.
Al interior del estado “es donde se presenta más incidencia de estos hechos de violencia contra los periodistas; pero es en la Zona de los Ríos donde un grupo de los profesionales del periodismo se encuentran amenazados y hay que sumarle Macuspana”.
Argaez de los Santos dijo que es sorprendente de que exista poca denuncia de los periodistas sobre estas amenazas.
“El reportero anda buscando la nota día con día, son los más agredidos; se han presentado casos de que hay periodistas que les rompen la cámara o se la quitan, al igual que la grabadora o el celular, y son amenazados y hasta intimidados, en donde interviene la propia policía o personal de seguridad de los servidores públicos”.
El presidente de la CEDH en la entidad mencionó que “nosotros lo que vemos son de manera concreta la actuación de los servidores públicos, entonces ese tipo de conductas si son recurrentes; sin embargo, existe poca denuncia porque ha habido poca eficacia en la sanción que se impone”.
Precisó que “por ejemplo, muchas veces las cámaras o herramientas de trabajo que le rompen al reportero, no es propiedad de ellos, es ahí donde los propietarios no están interesados en interponer las denuncias, por lo cual tiene mucho que ver el respaldo de las casas editoriales o de los que están a cargo de los medios de comunicación para los cuales laboran”.
Mencionó que “la situación del periodista está en un estado de desventaja, que tampoco se ha logrado prever que más que homenajes y algún tipo de fiesta se tiene que ver al periodista como trabajador”.
El ombudsman tabasqueño también señala que “no se trata de que el Estado asuma una responsabilidad que no le corresponde, pero la regulación sí se tiene que dar y se tiene que prever que son ciudadanos que están entregando su vida en el ejercicio de una profesión, y qué además es una labor necesaria para el derecho a la información que tiene la ciudadanía”.