De acuerdo con la revista Foro Jurídico®, en julio del 2023 ya existían cerca de 2000 universidades con escuelas o
facultades de derecho en activo a lo largo y ancho del país. En estricto sentido, la carrera de Derecho, es la segunda carrera más estudiada en México, sólo detrás de la carrera de administración en sus diversas ramas, lo que nos indica que la cantidad de estudiantes y egresados de estas escuelas y facultades son una fuerza representativa en el México actual.
De acuerdo con el Sol de México®, para el mes de julio del año 2024, ya existían en México cerca de 2200 escuelas o facultades de derecho, convirtiéndose es una gran fuerza laboral y académica. Sin embargo, de estas 2200 instituciones solamente el 10% tienen programas certificados de calidad, por lo que el Centro de Estudios sobre la Enseñanza y el Aprendizaje del Derecho, ha manifestado una seria preocupación derivada de la reciente reforma judicial que hace tremendamente laxos los requisitos para ser persona juzgadora, ya que el 90% de las escuelas y facultades en donde se enseña derecho, son consideradas como escuelas patito.
Hoy en día, el Consejo Nacional para la Acreditación de la Educación Superior en Derecho y el Consejo Nacional para la Acreditación de la Enseñanza en Derecho, son los certificadores principales en los que se puede recargar una universidad para acreditar que su enseñanza se ajusta a los estándares de calidad más altos en materia jurídica. Es así que universidades como la UNAM, ITAM, ANAHUAC, LA SALLE, LIBRE DE DERECHO e ITESM, además de facultades de derecho de Universidades Autónomas de varias entidades, son las únicas que cuentan con certificación de que sus egresados si saben Derecho. En el estado de Quintana Roo, la Facultad de Derecho de la Universidad Anáhuac Cancún, es de las muy pocas del sureste que cuentan con este nivel de acreditación académica.
Hace unos días que desde la mañanera, se ha expresado una narrativa de forma genérica en la que se dice que los abogados se vuelven corruptos, que los abogados son conservadores y se encuentran ligados a la derecha, que los abogados contravienen al derecho progresivo, y de la misma forma, se ha mencionado que los alumnos de algunas facultades como la de Derecho de la UNAM, se encuentran manipulados por sus maestros, haciendo evidente que dichos jóvenes no tienen competencias para pensar por sí mismos.
De igual forma, la narrativa que se ha generado cada día con más solidez de que los abogados como un conjunto singular dentro del territorio somos cada vez un peligro para el proyecto de nación que busca dejar el presidente de México antes de retirarse. Sin embargo, este nuevo frente que se abre desde la presidencia hacia los estudiantes de derecho y abogados de México, resulta evidentemente innecesario. Como innecesario fue dejar a jóvenes estudiantes con más de 700 derechos de petición fundados en el artículo 8vo constitucional violando sus derechos a los ojos del mundo; como innecesario abrir juicios políticos contra jueces que son más venganzas personales que juicios con contenido real, cuando los datos son evidentes y el punto controversial siempre ha ido ir de la mano con la profesionalización.
La voz levantada de los estudiantes, docentes y abogados postulantes en general, ha sido el riesgo de hacer laxos los requisitos en un país en que 90% de las escuelas de derecho no cuentan con certificación académica. En un país en el que 90% de las escuelas de derechos son patito!
Hoy en día, son cerca de medio millón de estudiantes de derecho en México y más de dos millones de abogados titulados que podrían ser parte de ese proceso selectivo, pero en realidad, de acuerdo a las cifras de las certificadoras de estudios en derecho, solo el 10% podrían se competentes para un trabajo de tal relevancia.
Por ello, es importante que se siga levantando la voz desde quienes somos estudiosos del derecho, porque el acceder al método propuesto de elección, sin que exista la posibilidad de colegiación de abogados, es decir, de contar con un sistema de acreditación de conocimientos como existe en varios países para que los abogados puedan representar a particulares o ser funcionarios públicos, es probable que se presenten a elecciones abogados emanados de escuelas patito, y terminemos en una crisis de justicia por exceso de personas juzgadoras que no saben derecho. Y entonces si, ante la imposibilidad de escuchar esas razones, es probable que los abogados electos para jueces terminen siendo un verdadero peligro para México.
Hugo Alday Nieto.
Licenciado en Derecho con Mención Honorífica por la Universidad La Salle del Pedregal.
Maestro en Derecho por la Universidad Anáhuac del Mayab.
Master Internacional en Propiedad Industrial, Intelectual y Derecho de la Competencia por la Universidad de Alicante, España.
Doctorante en Derecho por la Universidad Anáhuac, Cancún.