Presidente hasta donde tope 

Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes.

Marqués de La Fayette

 Ante la abierta amenaza del presidente López Obrador de continuar seis años más del gobierno de la Cuarta Transformación, millas, cientos de millas de ciudadanos se preparan y organizan, para en su momento, subvertir la militarización y sicariato que amenaza la participación ciudadana en las urnas. el próximo 2 de junio.

Tal como acostumbra la senadora Geovanna Bañuelos de la Torre: “bajo advertencia no hay engaño”, así los hace el presidente López Obrador a través de su marioneta Claudia Sheinbaum: ¡Vamos por el segundo piso de la Cuarta Transformación! ¿Seis años más de lo mismo? ¡Presidente, está cabrón!

La gente ya no va a seguir soportando callada la muerte de sus familiares por falta de medicamentos, de atención médica; de ser víctima de la delincuencia organizada y convencional; de ser asesinado por los sicarios que López Obrador asegura que tienen “Derechos Humanos”; de convertir en una pesadilla sus vidas si le secuestran algún hijo, hija, padres o familiar; si desparecen algún miembro de sus familias; si un niño con cáncer vuelve a morir por falta de medicamentos, si un pueblo es masacrado por la impunidad que les otorga a los delincuentes.

Tampoco seguirán callados aquellos que padecen las de Caín para sobrevivir ante el encarecimiento de los alimentos, de los servicios, de la vida, mientras los hijos y familia del presidente López Obrador son exhibidos robando, traficando con el poder de su padre y dándose una vida de magnates sin trabajar, que osan presumir en sus redes sociales. Tampoco seguirán soportando el multimillonario despilfarro de recursos públicos en la fracasada precampaña de su marioneta, que no levanta, mientras el pueblo bueno y sabio recibe sólo migajas.

El presidente López Obrador vive engañado por el círculo más cercano de sus aduladores, los que le ocultan la gravedad de las cosas, del fracaso de su gobierno, de sus insultos, de la corrupción de sus hijos y familia, de las millas de muertes por violencia, de igual número de desaparecidos, de vivir en pánico, con el “Jesús en la boca”, de ver cómo destruye el país, de insultar a periodistas y medios de comunicación que exhiben la corrupción, el fracaso de su gobierno, su mitomanía. , sociopatía y resentimiento social.

Presidente, no crea que regalando del erario podrá repetir seis años más a través de su marioneta Claudia Sheinbaum, se equivoca rotundamente. La mayoría del país está hasta la madre (me incluyo), de su narco gobierno; como lo están: médicos; periodistas; obreros; maestros; periodistas; campesinos; burócratas; viudos, y huérfanos por violencia desapariciones y falta de atención médica; empresarios; religiosos; mujeres; policías; carteles excluidos; militares y marinos se suman a esta larga lista de personajes subversivos que en su momento tomarán las calles para confrontar a su gobierno.



Diría Geovanna Bañuelos, sobre advertencia no hay engaño