Expertos del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) desarrollaron frijoles resistentes a las altas temperaturas, vitales para ayudar a mantener una fuente vital de proteínas para millones de personas en el mundo.
Se trata de un gran avance que brinda esperanza a agricultores alrededor del mundo, ya que las proyecciones indican que el 50 por ciento de la producción de frijol en los países podría perderse para el año 2050 debido al calentamiento global.
Productores de plantas en el CIAT explican que por regla general las plantas de frijol son “muy sensibles” al calor excesivo, por lo que no se cultivan en ambientes donde la temperatura de la noche es superior a 18 o 19 grados centígrados.
“Las temperaturas nocturnas son especialmente importantes porque la flor de frijol poliniza durante las horas de noche y este proceso de polinización es muy sensible a la temperatura”, dijo Steve Beebe, investigador del CIAT.
Los investigadores, dirigidos por Beebe, estudiaron en Colombia 30 variedades de frijol para determinar si contaban con ciertos rasgos que les permitiesen hacer frente a temperaturas nocturnas superiores a los 23 grados centígrados que se registran en esa región.
Los nuevos frijoles fueron desarrollados por cruces entre granos normales (blanco, negro y pinto) y la especie tépari, muy resistentes a las temperaturas altas y cultivados desde tiempos precolombinos en el norte de México y el suroeste de Estados Unidos.
Beebe explicó a la cadena pública de noticias BBC que el frijol tépari era un cultivo descuidado en ambientes muy calurosos y secos, así que comenzaron a evaluarlo y buscaron otras variedades que fueran capaces de producirse en esas condiciones.
“Seleccionamos 30 variedades y notamos que la gran mayoría eran producto de los cruces (entre frijol normal y tépari) que habían realizado hace 12 años”, sostuvo el investigador.
El frijol tépari como cultivo alimenticio ha sido inusual ya que es pequeño, aproximadamente la mitad del tamaño de uno normal, y tiene un bajo crecimiento, pero “tiene una tolerancia muy interesante al calor y la sequía”, precisó.
Los nuevos frijoles podrían ayudar a mantener una valiosa fuente de proteínas y hierro para casi la mitad de la población del planeta.